Los alumnos del Máster en Biología Avanzada de la Universidad de Sevilla tienen la oportunidad de sumergirse en la riqueza biológica de la ciudad de Ceuta, donde realizan prácticas de campo en los Espacios Protegidos locales. La asignatura Gestión y Conservación de la Fauna Terrestre y Marina les permite explorar la diversidad de la flora y fauna del estrecho de Gibraltar, con un enfoque particular en la región ceutí.
Durante este curso académico, los estudiantes han llevado a cabo sus prácticas en los espacios protegidos de Calamocarro-Benzú y la Zona Marítimo-Terrestre del Monte Hacho, bajo la tutela de los profesores Juan Francisco Beltrán, Pedro Abellán y Free Espinosa. Han tenido la oportunidad de identificar especies protegidas y endémicas, así como de aprender diversas metodologías de muestreo tanto en el medio terrestre como marino.
En una jornada inicial en el Instituto de Estudios Ceutíes, el Dr. Miguel Lizana de la Universidad de Salamanca compartió experiencias sobre proyectos de biología de la conservación, mientras Enrique Ostalé, de la Estación de Biología Marina del Estrecho, explicaba las singulares condiciones oceanográficas del área y su importancia ecológica.
En las salidas de campo, coordinadas por el decano de la sección de Ciencias del IEC, José Luis Ruiz, y acompañados por los expertos Juan M. Pleguezuelos y Fernando Ojeda, se exploraron diversos hábitats terrestres y marinos, como el arroyo de Calamocarro, el abrigo de Benzú, el monte de la Tortuga y los acantilados de Punta Almina. Además, se realizaron inmersiones y bautismos de buceo en la cala del Desnarigado para estudiar la vida marina local.
Estas prácticas han sido posibles gracias a la financiación conjunta de la Universidad de Sevilla y la Consejería de Fomento, Medio Ambiente y Servicios Urbanos a través de OBIMASA, en el marco de un convenio de colaboración entre ambas entidades públicas.
