Algo más de cuatrocientas personas, según fuentes de Interior, están acogidas en estos momentos en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes. Se trata de una cifra que se acerca al 89% de la capacidad máxima recomendada para el CETI, que se establece en 512, según admiten estas fuentes.
Estas cifras se conocen en un momento especialmente tenso en el CETI. En la noche del pasado martes, un encontronazo entre dos de sus residentes, un guineano y un argelino, derivó en un enfrentamiento entre grupos en la instalación del Monte de Ingenieros. Algunos de los implicados llegaron a arrancar parte de las tuberías y enseres de los baños para utilizarlos como armamento en una trifulca que se saldó con el despliegue policial y cuatro detenciones.
Las tensiones entre colectivos no son diarias, pero si forman parte de una cierta cotidaneidad, explican otras fuentes. "Hay que tener en cuenta que no es solo la situación en qué se encuentran, sino donde están. Es decir: ninguno quiere quedarse en Ceuta, y como la mayoría de las entradas suelen producirse con más de una persona generalmente del mismo colectivo, ocurre que ese es también el orden por el que salen a la Península, salvo que estemos hablando de otras cuestiones" como "solicitudes de asilo político".
En estos momentos, los subsaharianos son mayoría, con 140 miembros. Les siguen los argelinos, con medio centenar y el resto se divide en varias nacionalidades. La mayoría de este último epígrafe son marroquíes solicitantes de asilo político, explican las fuentes de Interior consultadas por Ceuta Televisión. El resto son nacionalidades 'clásicas' en el historial de la inmigración en Ceuta (yemeníes, sirios, etc), tras unos meses en los que determinados cambios en el funcionamiento de las rutas migratorias motivaron la aparición de venezolanos, cubanos o rusos entre la población del CETI.
