El IES 'Clara Campoamor' ha acogido esta mañana la celebración de la Fase Local de la Olimpiada de Filosofía, que este año versaba sobre las fronteras. Y de entre los temas propuestos, el elegido por el sorteo fue una historia que, tal vez, nos pueda resultar familiar.
"A y B son dos países fronterizos. A es rico, B es pobre. A se considera una democracia moderna basada en el Estado de Derecho y sus leyes respetan los derechos humanos. B es una dictadura teocrática conservadora y sus leyes solo respetan los preceptos de su religión, pero atenta contra los Derechos Humanos. A tiene mucha demanda laboral para los emigrantes y B sufre mucha emigración. Todo esto provoca que la frontera entre A y B sea un lugar muy transitado.Muchos habitantes de B emigran al país vecino en busca de trabajo. Cuando lo consiguen, regresan regularmente para reunirse con sus familias. Por otra parte, hay muchos habitantes de A que valoran el atractivo turístico de B: grandes paisajes, precios muy asequibles y magnífico trato a los visitantes adinerados. Así que no son pocos los turistas procedentes de A que viajan a B, aumentando el tránsito fronterizo. Algunos habitantes de A se quejan de que la frontera se ha convertido en un coladero para todo tipo de personas, sean buenas o malas, trabajadoras o delincuentes".
La historia de A y B continúa: "Otros se quejan de las largas colas que deben sufrir para visitar el país vecino. En B, muchos se quejan igualmente de las largas colas, pero no por viajes esporádicos, sino por la obligada moviidad laboral. También hay ONG's que denuncian corrupción en muchos contratos laborales que imponen los habitantes de A a los habitantes de B, aprovechándose de la brecha económica entre uno y otro país. También se ha denunciado la proliferación de mafias basadas en el tráfico de mercancías a través de la frontera. Por estas y otras razones resulta necesario, en suma establecer algún tipo de regulación. Pero ¿cual sería la regulación legítima de la frontera desde el punto de vista ético y en qué aspectos debería incidir".
A la prueba han concurrido alumnos de varios centros educativos. Queda por resolver, pues, el nombre del ganador. Ello al margen, por supuesto, de saber que es A y que es B...
