La Consejería de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha dado a conoce este lunes a los alumnos de 1ºG del IES Siete Colinas que han sido los ganadores del concurso Clase sin humo, grupo que disfrutará durante cuatro días, el próximo mes de septiembre de un campamento multiaventura en el complejo rural Miguel de Luque.
La entrega del premio a la clase ganadora se ha realizado esta mañana en el instituto, coincidiendo con el día de entrega de notas, en un acto en el que se les ha querido dar la sorpresa a los estudiantes y al que ha acudido la directora general de Sanidad, Rebeca Benarroch, así como el equipo del Plan Integral de Tabaquismo, después de que la semana pasada se realizara el preceptivo sorteo ante notario entre las clases finalistas.
Clase sin humo es una iniciativa para estimular la prevención del tabaquismo entre alumnos de primero y segundo de educación secundaria obligatoria reforzando el carácter voluntario de la decisión, el compromiso de grupo, la confianza en uno mismo y en los demás y la recompensa-premio como estímulo.
El objetivo es prevenir y retrasar la edad de inicio en el consumo de tabaco (cigarrillo tradicional, cachimba, cigarrillo electrónico, rapé…), así como promover el abandono de ese hábito.
Se participa por clases, de tal manera que todos los alumnos de cada clase participante se comprometen a no fumar por un periodo de seis meses, lo que implica en la práctica mantener la decisión hasta el final del concurso y someterse a las pruebas de verificación –cooximetrías- que técnicos del Plan Integral de Tabaquismo de la Consejería llevan a cabo para corroborar la abstinencia.
En la edición de Clase sin humo 2018-2019 –el primer certamen en Ceuta fue el curso 2005-2006) han participado 28 clases de 1º y 2º de la ESO, que sumaron un total de 802 escolares, de siete centros educativos y de las que seis fueron eliminadas. Conocida la clase ganadora por sorteo, Sanidad entrega un obsequio al resto de finalistas para agradecer su participación y esfuerzo.
Clase sin humo es un concurso que se convoca en la mayoría de los países europeos del marco de la Red Europea de Jóvenes y Tabaco. La evaluación de la competición desde el año 1997 ha demostrado su efectividad para prevenir el inicio del consumo de tabaco entre adolescentes, ya que las edades entre 12 y 18 años son decisivas para rechazar o adoptar el hábito de fumar. Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la edad de inicio está disminuyendo a la vez que aumenta la tasa de jóvenes fumadores.
En Ceuta, desde el curso 2005-2006 han participado en esta actividad 400 clases, es decir, unos 9.000 escolares.
