AGRESIÓN SANITARIOS

Libertad con cargos para el presunto agresor del 061

El presunto agresor del equipo del Servicio de Emergencias 061 ha sido puesto en libertad con cargos, quedando acusado de cuatro delitos de lesiones. Fue detenido por la Policía Nacional el miércoles poco después de la agresión que sufrieron los cuatro sanitarios.

Ha quedado en libertad con cargos en la mañana de este jueves el hombre detenido el miércoles tras presuntamente agredir a un equipo sanitario del servicio de emergencias 061 que acudió a su domicilio en la calle Poyuelo Domenech en la barriada de Hadú, siendo acusado de cuatro delitos de lesiones. Su puesta en libertad provisional responde a que las lesiones sufridas por los cuatro profesionales sanitarios son leves, según los partes médicos entregados.

Los hechos ocurrieron a las 7 de la tarde del miércoles cuando los sanitarios del 061 atendían una llamada de emergencia. El equipo de emergencias había acudido a la vivienda, alertados de un cuadro de convulsiones que sufría un hombre de unos 30 años.  A su llegada, el presunto agresor, sin mediar palabra, comenzó a agredir a los profesionales que acudieron al lugar. Según explican, el agresor intimidó a los sanitarios y les atacó, provocándoles diversas lesiones.

 

Los agredidos han descrito que el hombre, al llegar a la casa, la emprendió a golpes con el médico, que recibió patadas y puñetazos y agarró del cuello a la enfermera, teniendo que ser liberada por sus compañeros. En ese momento, el técnico de la ambulancia y el conductor también fueron víctimas de los golpes.

 

El médico del equipo presenta contusiones varias, además, uno de los técnicos sufrió un cuadro de crisis por hipertensión y el otro técnico fue agredido en la cara.

En la descripción de los hechos se dice que al acudir al domicilio y comenzar el médico del equipo a atender al paciente, de repente, comenzó a ser agredido. A continuación se abalanzó contra la enfermera, cogiéndola por el cuello en un intento de asfixiarla y dejándola tumbada en un sofá. El equipo del 061 asegura que conseguimos abrir la puerta y salir, afortunadamente.

 

De los profesionales sanitarios, el más perjudicado ha sido el conductor quien recibió más golpes al ser el último en abandonar la vivienda.  “Estamos muy doloridos y horrorizados por lo que hemos vivido”, lamentaba la enfermera del equipo