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Ibéricos 5J, conservas excelsas y estuches para lucirse, Algo Más Que Vinos

En Navidad y Año Nuevo se busca afinar hasta el último detalle de la mesa y del menú. Y para ayudar en esa tarea en este país tenemos la industria agroalimentaria más potente del mundo. Jamónes y embutidos 5J de paladar y grasa entreverada exquisitos, conservas de productos del mar de larga tradición y calibre infalible o estuches de vino con herramientas para sacarles el máximo partido. Regalos perfectos para estos días o complementos ideales para una mesa inolvidable. Todo eso lo ofrecen en Algo Más Que Vinos (plaza del Teniente Ruiz).

En esto de echar el resto para celebrar en familia y con amigos la llegada de un nuevo año y la Navidad siempre se puede retorcer un poco más la imaginación para sacar el máximo provecho y el máximo partido y lograr elevar el paladar a otras alturas. Al fin y al cabo por el gusto se nos elevan las endorfinas. Un buen jamón ibérico de bellota o un lomo de presa nos ponen en un estado de cuasi éxtasis y nos dejan preparados para querer hasta al familiar más pesado. Eso lo saben bien en Algo Más Que Vinos (plaza del teniente Ruiz) y no han escatimado en llenar su alacena con algo más que vinos para surtir Ceuta de manjares exquisitos con los que ensalzar las celebraciones propias de estos días.

 

Desde jamones y embutidos 5J en estuches de presentación igualmente exquisita hasta artefactos para sacar el máximo provecho al vino, como decantadores o bombas de vacío para sacarle el aire a esa botella que se quedó a medio consumir y que se quiere aprovechar en los días sucesivos.

 

Estuches también de vinos que pueden combinar a la carta botellas de diferentes calidades y utensilios como los mencionados.

 

O conservas de sobresaliente para cualquier sibarita que respetan la tradición de un país que es líder mundial en estas cosas de guardar alimentos de factura y calibre excelentes en mejunjes que lejos de restar sabor suman a esos mejillones o navajas que ya eran un tesoro antes de pasar a esperar la ocasión perfecta en el bote o la lata.

 

Y por supuesto manzanillas y olorosos de no menos tradición centenaria para regar todo eso en lo que este país no tiene quien le tosa, con covid o sin él, desde hace tanto tiempo que parece increíble que a las alturas tecnológicas que estamos no haya ningún visionario que haya dado con la tecla para reproducir ese trabajo artesanal del que sólo nosotros nos podemos sentir orgullosos, compararlo con conocimiento y valorarlo.

 

Ahí está la tienda llena de estos productos salpicando esa bodega excelsa de la que estos días ya les hemos ido dando cuenta a través de las recomendaciones de su experto, esperando a clientes que busquen un poquito más de calidad para sus mesas estos días o que simplemente quieran hacer un buen regalo, uno que al abrirlo haga salivar y dispare el deseo previo al descorche de felicidad y endorfinas.