El sindicato CSIF ha reiterado en las últimas horas su queja por el uso de la colaboración social para cubrir puestos estructurales dentro de la Administración pública. La central señala que no se puede entender como “legal y moralmente aceptable” el uso de esta figura, por lo que exigen la erradicación de la misma para poder así ofertar cuantas plaza sean necesarias para cubrir los puestos buscando el correcto y normal funcionamiento de los servicios públicos.
La central explica que los ciudadanos que acceden a colaboración social, a la que definen como “la esclavitud de nuestro tiempo”, son privados de derechos como trabajadores, no disponen de días libres ni de vacaciones y ni siquiera cotizan por el trabajo prestado lo que les obliga a seguir consumiendo su paro acumulado aún encontrándose en situación laboralmente activa.
CSIF sentencia que de seguir usándose la Colaboración Social debería ser de forma residual y solo para destinar esos puestos a sectores desfavorecidos y no, como consideran que ocurre en la actualidad, como mano de obra barata y sin derechos
