El Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía se congratula sobremanera por el resultado de la presión política que hemos ejercido tanto a nivel local como nacional al objeto de forzar la salida de la ultraderecha de la vicepresidencia de la Asamblea.
Han recordado que la dimisión por parte del "ultraderechista de Vox", conlleva, según el Reglamento de la Asamblea, simultáneamente el cese de la vicepresidenta del grupo municipal del PSOE por lo que la Mesa Rectora de la Asamblea queda sin efecto.
El MDyC considera que es el momento idóneo para incidir en que la multiculturalidad debe formar y estar presente en la constitución de la Mesa Rectora de la Asamblea, siendo fiel reflejo de la sociedad ceutí, que es plural y diversa.
La formación lamenta que lo que han calificado de "posición ambigua y negligente del grupo municipal del PSOE tras compartir gustosamente la vicepresidencia un largo año con VOX, ni siquiera haya tomado la decisión de renunciar al cargo para regenerar la mesa de la asamblea", sino que ha preferido apegarse al cargo.
Ha señalado que "por no hacer nada", la vicepresidenta del grupo socialista en el ayuntamiento ha esperado incluso a que sea su ya ex compañero de VOX el que presente su renuncia, no sabemos si lo habrán acordado previamente.
En los tiempos tan convulsos que vivimos, MDyC considera más importante que nunca contar con una mesa rectora de la Asamblea que refleje la realidad de la ciudad. "Una ciudad multicultural, diversa en la que la convivencia debe ser la máxima consigna" concluyen.
