El presidente de la Ciudad ha comparecido este lunes recordando en primer lugar a los últimos fallecidos por coronavirus y también a quienes ahora padecen la enfermedad, tal y como le sucedía a él en las últimas semanas. Una comparecencia en la que Juan Vivas ha vuelto a insistir en las dificultades de 2021 pero también en que Cetua sigue en pie y es hora de comenzar a abordar los retos que son determinantes para el futuro de nuestra ciudad.
Y es que Ceuta, en 2022, debe estar preparada para salir adelante “con nuevos bríos”, ha explicado, siendo este “un año decisivo de cara a las próximas décadas”. De ahí que el propio Vivas haya cifrado en 7 los retos a los que la ciudad debe hacer frente, explicando cada uno de ellos.
En primer lugar, el presidente ha insistido en que será fundamental seguir combatiendo la pandemia. Vivas ha destacado la importancia del número de pruebas diagnósticas que se realizan, que permiten detectar de forma precoz y tener un mayor control sobre la evolución de la misma. Es por ello, ha explicado que el propósito es mantener el funcionamiento del Punto COVID, todo ello a pesar de que se incremente la incidencia acumulada en compareción con otros territorios, un incremento que es fruto de que en Ceuta se realizan el doble de pruebas que la media nacional. Igualmente, el presidente ha insistido en que se seguirá trabajando en promover la vacunación, “combatiendo los mensajes negacionistas porque negar que la vacuna salva vidas, me parece absolutamente irresponsable”.
El segundo gran reto es el que tiene que ver con el Plan Estratégico que se está elaborando por parte del Gobierno de la Nación. El mismo, ha recordado el presidente, tiene por objeto definir cuáles tiene que ser las bases a través de las que Ceuta pueda tener un futuro marcado por la seguridad, la estabilidad y la cohesión social. Para el presidente de la Ciudad, “es una oportunidad histórica” para tratar de mejorar la situación de la ciudad y definir las opciones estratégicas en materias tan determinantes como la excepción a Schengen, la inclusión en la Unión Aduanera o la dotación de un estatus similar al del región ultraperiférica para Ceuta y Melilla.
Una de las grandes asignaturas pendientes, ha reconocido el presidente de la Ciudad, es la aprobación del PGOU. Vivas ha explicado que espera que la aprobación por el pleno pueda realizarse antes de que acabe el primer trimestre del año y que pueda estar aprobado por el estado en este mismo año. De esta forma, ha insistido, se dará “seguridad jurídica y certidumbre para el sector inmobiliario y de la construcción”. Junto a su aprobación, ha explicado Vivas, será necesario dotar a la administración de medios adecuados para la tramitación ágil de la solicitud de licencias.
El cuarto reto que se ha fijado el presidente es la ejecución de manera satisfactoria del presupuesto aprobado. El presidente ha destacado que se realizarán informes periódicos acerca del grado de cumplimiento del mismo, destacando que “no podemos frustrar las expectativas y el respaldo” recibido por el documento.
En quinto lugar, Vivas ha subrayado que es necesario seguir manteniendo el esfuerzo para atraer inversiones a nuestra ciudad en una doble vía, de un lado orientando y asesorando a todas ls empresas que traigan en proyecto y de otro mejorando el ecosistema, las condiciones que hacen atractiva la inversión en nuestra ciudad. En una línea similar y como sexto reto, Vivas ha subrayado que es vital seguir apoyando al tejido productivo local mediante una acción coordinada y de colaboración con los agentes económicos y sociales.
Finalmente, el presidente de la Ciudad ha puesto sobre la mesa que el séptimo reto pasa por transmitir confianza en el futuro de Ceuta porque sin la misma no será posible el futuro “que todos pretendemos”. Vivas ha subrayado que “en Ceuta hay motivos para la ilusión, la esperanza y la confianza”. “No se trata de negar las dificultades – ha explicado – sino de reconocer también las fortalezas”.
Vivas ha insistido en que “son retos de extraordinaria entidad y que solo se podrán lograr desde la unidad”. Unidad institucional, entre partidos y social porque “hay mucho en juego, por la envergadura y dificultad de los retos y por la oportunidad histórica que se nos brinda”.
