Todo hacía presagiar que la de este martes no iba a ser una sesión plenaria tranquila y así ha sido. El Presupuesto de la Ciudad para 2020 ha salido adelante con los votos a favor del Partido Popular y Vox y la abstención ya anunciada de MDYC, una abstención que su portavoz ha vuelto a indicar que no significa que sean los presupuestos deseados aunque mejoren algunos aspectos de la vida de los ceutíes.
El encargado de defender las cuentas por parte del PP ha sido el portavoz de Grupo y no el consejero de Economía y Hacienda. Una defensa que ha argumentado en que se trata de un documento responsable, que garantiza la acción política y la gobernabilidad.
En el mismo sentido, el portavoz de Vox ha considerado innecesario un segundo debate, cuando los Presupuestos ya se aprobaron en diciembre, ha señalado, y este tenía por objeto estudiar las alegaciones. Unas alegaciones que, en su caso, ha justificado en mejorar algunas partidas como la reforma de la Iglesia de África o la suplementación de las partidas para la Asociación de Autismo o la Federación de Baloncesto, demostrando que no acuden a hacer un papel sino a tratar de mejorar la vida de la gente.
Tanto el PSOE como Caballas se han mantenido en su negativa al Presupuesto, en el primer caso por considerar que se trata de un documento continuista, insolidario e injusto, y en el segundo por determinar no solo que no responde a las necesidades de la ciudad, sino que con el apoyo de Vox se convierte en un documento “fascista”.
Un debate para la polémica
Y es que, realmente, lo de menos en el debate plenario de este martes ha sido el Presupuesto. El mismo ha llegado marcado por la salida de dos de los diputados de Vox, desde hoy diputados no adscritos, y la filtración de una serie de mensajes racistas atribuidos a este grupo. Así las cosas, el portavoz del Grupo Popular ha señalado que esto le ha venido “genial” a grupos como Caballas, señalando que la finalidad real de “esta campaña orquestada” no era otra que lograr que no se aprobaran los presupuestos.
Respecto a este asunto, el PSOE ha asegurado que ha remitido a sus servicios jurídicos los mensajes en cuestión para que determine las acciones jurídicas a emprender, mientras que Vox no ha dudado a la hora de señalar que tanto la fuente como quienes han difundido unos mensajes manipulados “sufrirán las más duras consecuencias”.
El mayor enfrentamiento, sin embargo, se ha vivido durante la intervención de Caballas, después de que el portavoz del Grupo Popular haya acusado a los localistas de tratar de dividir y de emplear el discurso del odio. Unas palabras que han indignado a los miembros de esta formación presentes en el debate como público, llegando a ser expulsado uno de sus asesores tras gritar “fascistas” a los miembros de Vox.
