sábado. 20.04.2024

Pese a las derrotas del autodenominado Estado Islámico en el ámbito militar, la amenaza no ha desaparecido. Ni mucho menos para España, aunque la pretensión de reconquistar Al Andalus no es nueva, sino permanente. Lo considera así Carola García-Calvo, investigadora del Real Instituto Elcano que ha presentado en Ceuta un libro, junto con otros miembros de esa entidad, que resume la evolución del yihadismo en España desde los atentados del 11 de Marzo en Madrid.

 

 

Respecto al papel de Ceuta y Melilla, es diferente el análisis al de otras regiones en España en cuanto a la partida a las zonas de conflicto de personas radicalizadas. La frontera con Marruecos, de donde han partido cientos de personas hacia Siria en los últimos años, y la mayor solera de la comunidad musulmana en ambas Ciudades Autónomas son los hechos diferenciales.

 

 

 

En cuanto a los cambios vividos desde 2004, el que más llama la atención es precisamente ese, el de la radicalización de autóctonos. Carola García-Calvo recalca que se habla de personas que o han nacido en España o se han criado en nuestro país procedentes de la emigración y que presentan una seria crisis de identidad. Esto, dice, es el terreno donde la propaganda de DAESH o Al Qaeda hace mayor efecto.

 

 

Considera fundamental el papel de los servicios de inteligencia y admite, también, que los atentados en algunas partes de Europa tras las derrotas militares de DAESH no son una casualidad, sino un llamamiento de ese grupo terrorista a sus fieles para que atenten como y donde puedan. Y advierte que ninguna de las dos organizaciones terroristas han desaparecido. Es más: Al Qaeda, según ella, ha aprovechado los últimos años para reorganizarse.

La amenaza de DAESH a España “no desaparecerá” en próximos años