En la ciudad de las cuatro culturas y la convivencia un nuevo incidente, en este caso en el ámbito educativo, ha vuelto a poner sobre la mesa que no es oro todo lo que reluce. La Dirección Provincial de Educación, dirigida por León Bendayan, se ha visto obligada a llamar al orden al equipo directivo del Colegio de Educación Infantil y Primaria Andrés Manjón para evitar que los alumnos sean segregados en relación a su pertenencia a una comunidad religiosa o cultural.
Este tirón de orejas llega después de que varias familias de alumnos de 3 años denunciaran la división realizada entre los 75 alumnos del primer curso de Infantil que se imparte en el centro escolar, una división que la Inspección Educativa confirmó y que desde la dirección del colegio han justificado en facilitar la impartición de las asignaturas de Religión Católica o Islámica en cada caso.
Esta explicación, en cualquier caso, no ha convencido a la Dirección Provincial de Educación que por boca de su director ha señalado que las clases “se deben formar sin atender a sesgos de ningún tipo”.
Con la nueva agrupación de alumnos, los niños pasarán juntos la mayor parte de la jornada lectiva, separándose por religiones tan solo cuando vayan a cursar la asignatura referente a las mismas.
