miércoles. 24.04.2024
PASO DE BENZÚ

Las trabajadoras de Beliones vuelven a exigir la reapertura del paso de Benzú

Las trabajadoras de Beliones (Bel Younech) no se rinden y siguen exigiendo a la delegada del Gobierno que reconosidere su decisión y reabra el paso para los trabajadores transfronterizos que residen en la vecina localidad marroquí. Insisten en que siempre han podido acceder a la ciudad por ese paso, sin generar ningún tipo de incidente y no comprenden porque tienen que ser las que paguen las consecuencias de los destrozos producidos en el último salto masivo a la valla de inmigrantes del pasado mes de agosto.

Con la vista puesta en el Tarajal II durante las últimas semanas, pocos son los que se acuerdan ya de la situación de las trabajadoras transfronterizos de Beliones. Unas trabajadoras que desde el pasado 14 de septiembre han visto como se les negaba el paso por el que hasta el momento había sido su punto de acceso habitual a la ciudad: el paso de Benzú.

 

Un paso de Benzú que, tal y como recordaran, la Delegación del Gobierno ordenaba cerrar tras los destrozos producidos en las instalaciones de la Guardia Civil durante el último salto masivo de inmigrantes, que tenía lugar el pasado 30 de noviembre, y cuyas consecuencias pagan desde entonces las trabajadoras de Beliones.

 

Unas trabajadoras que no quieren que su causa sea olvidada y que tras manifestarse frente a la Delegación del Gobierno y reunirse con su máxima responsable no han logrado su objetivo: seguir transitando entre los dos países como lo hacían hasta ahora, por el paso hasta ahora habilitado junto a sus casas, y no teniendo que recorrer la distancia que separa Beliones del Tarajal, que supone cerca de una hora de viaje y un importante desembolso económico, tanto, aseguran, que es casi la mitad de sus salarios.

 

Se da el caso de que muchas de estas mujeres llevan décadas trabajando de forma legal en España y cruzando a diario por un paso de Benzú en el que nunca han tenido problemas, ni con los agentes de la Guardia Civil que prestan allí su servicio, ni con el Gobierno, ni con los vecinos de la zona, con los que, en muchos casos, comparten lazos familiares.

 

Insisten, además, en que el número de personas que transitaban a diario por este punto es muy reducido y que ni de lejos llega al centenar de personas, en horarios escalonados y sin generar aglomeraciones. Una situación muy diferente a la que hoy por hoy deben afrontar las trabajadoras de Beliones, esperando horas, han explicado, junto a la frontera del Tarajal para lograr acceder a la ciudad.

 

Todas estas reclamaciones pueden verse en un vídeo editado por el sindicato CGT, desde la barriada de Benzú, donde reclaman una solución a la situación de estas trabajadoras, de cuya causa han hecho bandera en Ceuta.

Las trabajadoras de Beliones vuelven a exigir la reapertura del paso de Benzú