Ceuta y Melilla se sitúan en el ojo del huracán por una grave crisis de recursos humanos en su sistema sanitario. La falta de médicos y las carencias en la gestión de los servicios asistenciales han sido etiquetadas como las peores de España y Europa, desatando una inquietud alarmante tanto en las autoridades como en los ciudadanos.
En el horizonte, un escenario desolador: ambas ciudades la presentan la tasa de médicos por habitante más baja del país. El informe del Ministerio de Sanidad resalta que el 45% de los profesionales supera los 60 años, poniendo de manifiesto una necesidad urgente de reformas y políticas de salud adaptadas a sus necesidades específicas.
El conflicto laboral, que inició su andadura el pasado 9 de marzo, se ha convertido en la huelga más prolongada de la historia española, con el objetivo de hacer frente a las precarias condiciones laborales y el deterioro del sistema sanitario. Sin embargo, después de casi once meses, la situación ha empeorado drásticamente, dejando más de 12,000 consultas afectadas y cerca de 400 intervenciones quirúrgicas canceladas.
La estadística oficial del Ministerio de Sanidad, cuestionada por sindicatos médicos y profesionales del sector, ha sido acusada de distorsionar la realidad. Enrique Roviralta, presidente del Colegio Oficial de Médicos de Ceuta, asegura que las cifras de espera ofrecidas por el Ministerio difieren enormemente de la realidad que afrontan los pacientes. Las largas listas de espera se han convertido en una constante en el día a día de los ciudadanos, con meses de demora para una simple consulta con especialistas.
La falta de recursos humanos y la carencia de especialistas han generado un colapso asistencial. Dermatología en Melilla lleva más de un año sin un especialista, mientras que en Ceuta la oncología se encuentra desbordada con solo dos profesionales. El Real Decreto 118/2023 habilita medidas para incentivar la contratación de personal, sin embargo, hasta la fecha, no se han implementado medidas efectivas para atraer médicos a estas plazas.
El conflicto laboral y las condiciones salariales han generado una situación insostenible, con las peores guardias remuneradas del país y una penalización por la compatibilidad entre el sistema público y privado, lo que ha ahuyentado a profesionales cualificados. Esta situación, además, propicia la llegada de médicos sin titulación, deteriorando la calidad asistencial que se ofrece a los usuarios del sistema sanitario de ambas ciudades.
