Por segundo día consecutivo, cientos de personas han vuelto a concentrarse en la frontera de Bab Sebta, queriendo pasar a Ceuta para ejercer labores relacionadas con el porteo. Según cuentan a Ceuta Televisión fuentes oficiales, se trata de un contingente "algo menor" que en días anteriores, aunque bastante numeroso. La dinámica, exactamente la misma: los porteadores se concentran queriendo acceder a Ceuta para comprar, mientras la policía marroquí no les deja entrar.
Una situación que no tiene visos de solucionarse, al menos en el corto plazo. Delegación del Gobierno ha informado en varias ocasiones del aplazamiento de la reapertura del Tarajal II. La intención, la última fecha anunciada, sigue siendo la de reanudar la actividad antes de que acabe el presente año.
Mientras, la situación en Marruecos comienza a ser ciertamente tensa. Publicaciones en redes sociales magrebíes reportan que "las dificultades económicas, el gobierno de la corrupción y la tiranía" pueden ser el detonante del suicidio de una porteadora en Martil. Otro hombre, según estas fuentes, se habría autolesionado en las últimas fechas a modo de protesta por no poder acceder a Ceuta a buscarse su sustento. Unas obras, pues, que de momento están lastrando tanto al lado español como al marroquí.
