La historia de la Transición hacia la democracia puede contarse, también, a través del asociacionismo, y de como surgen a lo largo de todo el país plataformas que reivindican derechos sobre determinados colectivos. Uno de estos movimientos es el animalista: hace cuatro décadas se constituye en Ceuta la Sociedad Procectora de Animales y Plantas.
Una entidad que hoy ha celebrado sus cuatro décadas de existencia en un ambiente festivo, con mercadillo, tapeo solidario y la exhibición de los adiestradores del Cuerpo Nacional de Policía. Pero a pesar de la onomástica redonda, no hay mucha euforia. Durante este año, por ejemplo "han aumentado los abandonos, sobre todo en verano", cuenta con resignación la presidenta de la entidad, Victoria Santana.
El motivo "puede ser variado, pero hay que tener en cuenta que en muchas ocasiones se compra un perro o un gato sin tener en cuenta las consecuencias. Al principio, todo es muy bonito, pero luego en el caso de los perros hay que bajarlos llueva, truene o nieve; los animales se hacen sus necesidades en casa, rompen y muerden. Yo recomiendo que se adopte antes de comprarse, pero lo importante es que seamos responsables y tengamos en cuenta lo que supone meter a un animal en casa. Si no lo tenemos claro, si no asumimos que es un ser vivo, mejor regalar otra cosa".
Santana explica que "por ello, tenemos la Protectora hasta arriba, no podemos más" y recuerda que "cualquier ayuda es bien recibida: económica, por Bizum, transferencia o al contado, pero también aceptamos sacos de pienso, mantas... Cualquier cosa nos viene bien".
Y también invita "a que la gente visite la Protectora, se haga socio. Abrimos de martes a jueves, entre las 16.30 y las 19.00, aproximadamente. Simplemente, con ayudarles a dar un paseo, que los perros lo agradecen mucho, nos están echando una mano", señala.
En el local, buen ambiente. Y una recaudación interesante: 160 entradas, al margen de las consumiciones y una Fila Cero, al precio de cinco euros. Cuarenta años, pues, de ayuda a los que no hablan.