A lo duro de un diagnóstico de cáncer, muchas personas le suman ser conscientes de que están en los últimos momentos de su vida. Crudo, pero real. Pero es que en muchos casos, además, hay otro mal qué lamentar: la soledad. Son muchas -sin cuantificar- las personas que en Ceuta se encuentran en ese amargo trance. Sin cuantificar, porque el presidente de la AECC, Jesús Ferreiro, no disponía del dato exacto en el momento de explicar un convenio entre la entidad que dirige y la Cruz Roja.
Gracias a un acuerdo firmado en la sede de de la segunda, y que contará con el aporte económico de Fundación La Caixa, voluntarios de Cruz Roja complementarán a los de la AECC para acompañar a quien afornte la lucha contra el cáncer en sus últimos estadíos en la más absoluta soledad. No es una iniciativa del todo novedosa: cuenta Antonio Montoya, presidente de Cruz Roja Ceuta, que acuerdos como este ya se han puesto en marcha en provincias como Cádiz o Tenerife.
La atención "desde el punto de vista médico está garantizada por la Unidad de Paliativos", destacó Ferreiro para matizar que "se trata de acompañar a estas personas en determinados momentos del día" en los que no llegue la atención médica. La labor de los voluntarios podrá desarrollarse tanto en el domicilio de las personas enfermas como en el Hospital, aclararon.
Será la AECC la parte 'nuclear' de este proyecto, solicitando por ello la presencia de voluntarios de Cruz Roja en cuanto sea necesario. Los voluntarios adscritos a este proyecto deberán tener, eso si, "una formación específica" para afrontar junto a la persona a la que acompañen los últimos momentos de la vida. Ferreiro, no obstante, admitió que este convenio no tiene porque ceñirse, de modo exclusivo, a los enfermos en situación de soledad. Para compensar la falta de voluntarios "pensamos en Cruz Roja", dijo el presidente de AECC. El de la entidad fundada por Henri Dunant señaló que "obviamente, siempre vamos a estar a disposición" de quien les necesite.
Respecto a si es necesario, o no, una mayor dotación de medios a la Unidad de Paliativos, Montoya señaló que "no es algo de lo que tenga datos, pero evidentemente cuanto más personal, mejor para todos". El acuerdo, que entra en vigencia con carácter inmediato, fue suscrito en el despacho de Montoya, en la nueva sede de Cruz Roja Española junto al pasaje Las Balsas.