Yassine Kaanja, de 25 años y nacionalidad marroquí, fue detenido como presunto autor de la muerte del sacristán de la iglesia de La Palma y por herir a otras cuatro personas, con un bolomachete. El jueves por la noche fue trasladado a Madrid, donde ha estado bajo custodia, siendo interrogado por los especialistas de la lucha antiterrorista.
De acuerdo a las informaciones publicadas por la Cadena Ser, ha pasado a disposición judicial a las 9.00 de hoy, siendo trasladado a las dependencias de la Audiencia Nacional donde se investigan los hechos como delito de terrorismo, aunque, según las declaraciones del ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska "todas las hipótesis continúan abiertas".
El detenido por el ataque a las dos iglesias de Algeciras no tenía antecedentes penales, pero sí un expediente de expulsión por su situación irregular en España desde junio de 2022. La expulsión se le notificó en noviembre y estaba pendiente del trámite burocrático con Marruecos para llevarse a cabo.
La Policía halló propaganda yihadista en la casa abandona en la que residía en Algeciras el investigado. La investigación analiza la posible radicalización del detenido, así como los antecedentes de salud mental que tendría en Marruecos.
