A media tarde del 12 de junio de 2019, comenzaba a llegar la noticia a los medios de comunicación. Un gran "jaleo" de ambulancias en Los Rosales, donde "parece que ha habido tiros", nos alertaba un amigo a Ceuta Televisión. Minutos después, la noticia tomaba cuerpo: un agente de la Guardia Civil se acababa de quitar la vida delante de su esposa e hijos.
Desde entonces, en Ceuta, cada vez que la palabra "Brahim" o "guardia civil suicidado" se escribe en un titular, el tema despierta cierto interés. Pero los últimos acontecimientos en torno al 'Caso Brahim' han hecho trascender, incluso, dicha expectación allende el Estrecho.
Sobre todo, a raiz del sábado por la mañana, cuando se conocía que el Juzgado número 4 de la Ciudad desestimaba que Brahim hubiera disparado a su mujer antes de quitarse la vida, como en un primer momento parecían indicar las investigaciones policiales. De inmediato, el asunto se ha 'viralizado' en redes sociales, sobre todo en torno al papel de la Plataforma Feminista -que convocaba una concentración de rechazo a los hechos horas después- y de la intención de la familia del fallecido de emprender acciones legales contra este colectivo.
Han sido muchos los "clicks", "likes" o "retweets" a nivel nacional en los últimos días, en muchas ocasiones de 'twiteros' ideológicamente contrarios a la Ley de Violencia de Género o de colectivos profesionales vinculados a la Guardia Civil o Policía Nacional. No sólo cuestionan a la Plataforma Feminista, sino la interpretación de los medios de comunicación sobre el asunto.
A esta eclosión del 'caso Brahim' ayuda, evidentemente, la fecha de este lunes y el debate abierto sobre la conveniencia o no de modificar la Ley de lucha contra la Violencia de Género. Un debate en el que siempre ha subyacido otro, en torno a si esta ley vulnera o no la presunción de inocencia. Y con un caso como el de Brahim, con triste epicentro en nuestra ciudad.