El ministerio de Sanidad solo contabilizó los fallecidos que hubieran dado positivo por una prueba diagnóstica PCR durante la primera ola de la pandemia, a pesar de que dichas PCR escaseaban, incluso tras la petición de la Organización Mundial de la Salud para que los países que incluyeran a los sospechosos en sus cifras.
Debido a esto, entre otras circunstancias, no se sabe realmente cuantas personas fallecieron a causa del coronavirus en esos primeros dos meses. Sin embargo, El Español ha publicado este jueves unas informaciones que recogen lo datos del INE al respecto, y que cifra el número de fallecidos en ese periodo - del 9 de marzo al 11 de mayo - en 118.287 personas, de acuerdo a los certificados de defunción de esas fechas.
Comparando lo con los tres años anteriores, se produjo un "exceso" de muertes en torno a 45.000 personas con respecto a cada año. Aunque las causas de este enorme incremento no se pueden determinar con exactitud, son atribuibles a la pandemia, directamente a la COVID-19, o bien al caos asistencial del sistema sanitario.
En esta segunda ola, y a pesar de contar con un mayor número de pruebas diagnósticas, las cifras siguen aumentando y la diferencia, sin explicación, con los años anteriores sigue creciendo.
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