Pilar Orozco, consejera de Cultura, agradeció a Jesús Luna por acordarse de su tierra y de todos los ceutíes al incluir la ciudad en este gran proyecto. Asimismo, destacó el valor de la convivencia como uno de los motores principales de la expedición y enfatizó que Ceuta es una ciudad acogedora de distintas culturas que trabajan juntas en grandes proyectos.
Por su parte, Jesús Luna, director del grupo, expresó su emoción al dirigir la expedición y, al mismo tiempo, representar a su ciudad natal, Ceuta. Subrayó que esta travesía representa valores universales, donde 22 niños expósitos, rescatados para la expedición, jugaron un papel crucial al portar la vacuna de la viruela bovina para inmunizar a miles de personas en diferentes partes del mundo. Esta expedición filantrópica, declarada Memoria del Mundo por la UNESCO, es un ejemplo de cómo la juventud puede transformar la realidad y crear un mundo mejor.
El itinerario de la Expedición Balmis, Salvany y Zendal abarca varias comunidades autónomas en España, incluyendo Madrid, Valencia, Cataluña, Navarra, País Vasco, Galicia, Andalucía y Ceuta, así como también visitarán tierras portuguesas. Los jóvenes aventureros recorrerán diversas rutas, como el Camino de Santiago en Galicia y la ascensión a la Mesa de los 3 Reyes, en un esfuerzo por vivir de manera sostenible y reducir su huella de carbono.
Esta Expedición 'Vuelta al Mundo' busca que los jóvenes se conviertan en acuíferos del siglo XXI, es decir, en transformadores que promuevan valores como la igualdad de oportunidades, la protección del medio ambiente y la solidaridad internacional. Inspirados por el espíritu de la histórica expedición, estos jóvenes aventureros buscan llevar a cabo acciones que beneficien a la humanidad y al planeta.
Ceuta, una ciudad multicultural y hospitalaria, acoge con brazos abiertos a estos jóvenes aventureros, quienes tienen la oportunidad de conocer su patrimonio histórico y cultural mientras disfrutan de una experiencia formativa enriquecedora.
La Expedición Balmis, Salvany y Zendal es una muestra de cómo la historia y los valores universales pueden inspirar a las nuevas generaciones a ser agentes de cambio, forjando un futuro más justo y sostenible para todos. Así, estos jóvenes continuarán el legado de aquellos héroes de la expedición filantrópica, haciendo del mundo un lugar mejor para todos.
