Y la tradición marca que cada período de actividades no es un año, sino una 'ronda solar'. La misma que ha comenzado este sábado, con un grupo heterogéneo: desde los seis a los cincuenta y ocho años de edad. "Algunos se incorrporan por primera vez, y les damos la bienvenida. Luego celebramos la Ibatia, una reunión muy especial a la que solo asistimos nosotros para hablar, contar experiencias y planificar el año", cuenta Carolina, hija del anterior y también perteneciente al movimiento scout.
Como manda la tradición, el portavoz de cada patrulla ha saludado al resto en representación de su grupo.Y todo cerrándose con una consigna "Los scouts estamos unidos, jaleaba Jesús Martín. Previamente, había recordado a los más veteranos que "tenemos que acoger a nuestros nuevos hermanos y hermanas". Porque asi se consideran en el movimiento scout. Así llevan haciéndolo, con sus altos y bajos, desde aquella reunión de 1915 en San Amaro.