Como cada Lunes Santo, la imagen de Nuestro Padre Jesús Cautivo y Rescatado y la de María Santísima de los Dolores han vuelto a hacer vibrar las calles de Ceuta. Tras su traslado de este sábado, el Señor de Ceuta ha vuelto a recorrer las calles del centro de la ciudad, en una salida procesional diferente pero marcada por el fervor de siempre.
Cientos de personas esperaban desde antes de las siete de la tarde a las puertas de la Casa Hermandada a la espera de que se produjera la tan ansiada salida procesional tras dos años de pandemia. Una pandemia cuyas consecuencias han seguido marcando la de este año, que se ha desarrollado en parihuelas y en la que no se ha librado, como sucede tradicionalmente, a ningún preso. El motivo, ya lo saben porque se lo contábamos hace algunas semanas en Ceuta Televisión, la incertidumbre sobre si esta Semana Santa iba a poder desarrollarse con normalidad o no, lo que impidió tramitar con tiempo el indulto de un preso en esta ocasión.
Tras la salida, el Cristo de Medinaceli y Nuestra Señora de los Dolores han recorrido uno de los puntos más espectaculares de su salida procesional, los Jardines de la Argentina, donde cientos de personas se han quedado para disfrutar del paso de ambos antes de su entrada ya en el centro de la ciudad.
Un centro que espera su llegada para que fuera la primera de las dos cofradías que salían este Lunes Santo en entrar en carrera ofial, aún de día, en una Semana Santa en pleno mes de abril y con el horario de verano permitiéndonos disfrutar de más horas de luz solar y, por tanto, de un Medinaceli entrando en la Gran Vía antes de caer la noche.
Tras la Gran Vía, otro punto espectácular, la calle Jáudenes, una de las más transitadas por los ceutíes en estos días de Semana de Pasión, antes de entrar en la Santa Iglesia Catedral para realizar la tradicional Estación de Penitencia.
Y desde allí, vuelta a la Casa Hermandad, con la satisfacción del deber cumplido, con el orgullo de haber hecho disfrutar a los ceutíes de una de sus imágenes más veneradas. Todo ello a pesar del amago de lluvia que ha hecho sufrir a más de uno en el último tramo del recorrido. Lluvia que finalmente ha respetado a Jesús Cautivo y Rescatado y María Santísima de los Dolores.
