El ex secretario general de UGT, Nicolás Redondo Urbieta, ha muerto en Madrid a los 95 años de edad. Así lo ha anunciado el sindicato que dirigió durante décadas, tanto en la clandestinidad como en la democracia.
Nacido en Baracaldo (Vizcaya) en 1927, Redondo fue obrero metalúrgico. Posteriormente, empezó a militar en la clandestinidad tanto en la UGT como en el PSOE. De hecho, cuando tuvo lugar el último Congreso socialista en el exilio en Suresnes (Francia), apartó su candidatura a relevar a Rodolfo Llopis en favor de un joven abogado sevillano al que llamaban compañero Isidoro: Felipe González.
Una vez restablecida la libertad sindical, Redondo lideró la UGT, jugando un papel clave en la Transición y en los denominados 'Pactos de La Moncloa'. Fue diputado por Vizcaya hasta 1987, año en que presentó su dimisión en disonancia con la política laboral del Gobierno González.
Redondo convocó, en 1988, una huelga general contra el Gobierno socialista, lo que acabó por alejarme definitivamente de su antiguo compañero. Abandonó la dirigencia de UGT en 1994, entregando el relevo al extremeño Cándido Méndez.
Sus últimos años al frente del sindicato, además de algunos conflictos más con el PSOE, estuvieron marcados por el 'Caso PSV', un fraude en la Promotora Social de Viviendas impulsada por UGT.
Era padre de Nicolás Redondo Terreros, ex secretario general del PSOE en el País Vasco, que mostró una línea muy crítica con los Gobiernos de Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez por los acercamientos entre el PSOE y el nacionalismo vasco, en especial la denominada izquierda abertzale
