En el marco del Día Mundial de la Salud Mental 2023, el Sindicato de Enfermería, SATSE, hace un llamado urgente a fortalecer la atención en salud mental y abogar por un mayor compromiso por parte de las administraciones públicas en este campo. En un contexto donde una de cada cuatro personas tendrá un trastorno mental a lo largo de su vida, SATSE subraya que la atención a la salud mental es un "derecho humano universal", respaldado tanto por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como por organizaciones como la Confederación Salud Mental España.
Uno de los datos más preocupantes resaltados por SATSE es que más de la mitad de las personas que necesitan tratamiento para trastornos mentales no lo reciben, y un porcentaje significativo de aquellos que sí lo reciben no obtienen el cuidado adecuado, según datos de la Confederación Salud Mental España. Ante esta realidad, el Sindicato reclama que los servicios de salud cuenten con un mayor número de enfermeras especializadas en salud mental para satisfacer la demanda de cuidados especializados en este campo. SATSE enfatiza la importancia de llevar a cabo un estudio detallado de las necesidades específicas de cada comunidad autónoma y crear plazas suficientes para estos profesionales de la salud.
Las enfermeras desempeñan un papel crucial en la prevención, detección y tratamiento de los trastornos mentales, así como en la lucha contra la desinformación y los estereotipos falsos que rodean a la salud mental. La falta de conciencia sobre esta área puede llevar a la discriminación y el estigma hacia las personas que padecen problemas de salud mental. Además, SATSE destaca la importancia de garantizar la continuidad en la atención y cuidado de las personas con trastornos mentales, especialmente en el contexto de la Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de Salud 2022-2026 del Ministerio de Sanidad. El Sindicato considera que esta estrategia aún no se ha implementado adecuadamente y urge a las administraciones públicas a priorizar la atención a la salud mental.
La pandemia de COVID-19 ha agravado aún más los problemas de salud mental en la población, incluyendo el suicidio, la ansiedad, la depresión y otros trastornos. SATSE insiste en la necesidad de contar con enfermeras y enfermeros especializados en salud mental en hospitales y centros de salud, así como en dispositivos preventivos y terapéuticos, como las unidades infanto-juveniles y las unidades de conductas adictivas. Los trastornos de salud mental se prevén como la principal causa de discapacidad a nivel mundial para 2030, según la OMS, lo que hace imperativo que las administraciones públicas asignen los recursos y medios necesarios para abordar este problema de primera magnitud.
