jueves. 25.04.2024
PLATERCE

Temporales, inundaciones, terremotos o inmigración masiva, entre los riesgos recogidos por el PLATERCE

La primera jornada de formación sobre el PLATERCE para los agentes actuantes ante cualquier emergencia ha tenido por objetivo explicar qué es este plan y cuáles son sus objetivos principales. Durante la misma se han explicado tanto las características de la ciudad como a los riesgos a los que se enfrenta, desde los causados por los temporales y las inundaciones a los generados por terremotos o el fenómeno migratorio.

Vehículo de emergencias a las puertas del Palacio Autonómico / Rafa Báez
Vehículo de emergencias a las puertas del Palacio Autonómico / Rafa Báez

José Antonio Méndez, trabajador del TSI de la Ciudad Autónoma y encargado de formación del voluntariado de Protección Civil ha sido el encargado de abrir las jornadas que, a lo largo de toda la semana, mostrarán a los agentes actuantes ante cualquier emergencia las novedades que implica el nuevo Plan Territorial de Emergencias de nuestra ciudad. Una primera cita que tenía por misión aclarar qué es PLATERCE y también cuáles son sus objetivos, así como mostrar las características de la ciudad y los principales riesgos que la misma asume.

Así, en respuesta a la primera pregunta, ¿qué es el PLATERCE?, Méndez ha recordado que se trata de un documento técnico en el que ser recoge el conjunto de criterios de procedimiento para dar respuesta, por parte de la administración, a una situación de emergencia dentro del entorno de Ceuta. Se trata, ha explicado, de una norma básica que establece el marco regulador y los riesgos a los que en enfrenta la ciudad, integrándolos en planes especiales y sectoriales.

El objetivo principal del PLATERCE, ha continuado, pasa por planificar y establecer la estructura organizativa que garantice la respuesta inmediata y eficaz a la situación de riesgo por la que se esté atravesando. Situaciones, ha insistido, que pueden estar recogidas en el plan o no, tal y como sucedía durante la pandemia, pues en el plan anterior no existían medidas para afrontar una situación de ese tipo, más propia de la ciencia ficción. Así el PLATERCE debe servir para coordinar las operaciones entre los distintos grupos actuantes, dirigir medios y gestionar recursos, activar mecanismos de respuesta rápida y eficaz, establecer las funciones de cada organismo participante, permitir la integración de los planes de emergencia que se aprueben o prever la transferencia de funciones a la administración general del Estado en caso necesario.

Durante su intervención, Méndez ha puesto sobre la mesa las características geográficas, climatológicas, políticas, o de comunicaciones de la ciudad, analizando, con ellas, los riesgos a los que se enfrenta Ceuta. Riesgos como los producidos por el clima, con importantes temporales, especialmente graves en el caso del levante, con rachas de entre 80 y 100 kilómetros por hora, acompañados de temporal costero, con olas de 4 o 5 metros, o inundaciones, motivadas por fenómenos como la “gota fría” que dejan gran cantidad de precipitaciones en un corto periodo de tiempo, y nos dejan imágenes como las vividas durante la primavera de 2021, cuando Ceuta fue el lugar del mundo que registró mayor cantidad de lluvia en un día. 

Riesgos de carácter geológico, como deslizamientos de tierras o desprendimientos, especialmente en la zona de García Aldave, o los provocados por seísmos. La ciudad, ha recordado Méndez, se encuentra muy cerca de una zona de importantes movimientos de placas, con terremotos constantes en espacios como Alhucemas o la costa mediterránea del país, especialmente Granada. Ante los riesgos de un gran terremoto o un maremoto, la ciudad debe estar preparada para asumir cualquier circunstancia inesperada. Así, ha desvelado, las olas de un maremoto en la zona de Granada tardarían 21 minutos en llegar a la ciudad, unas olas, ha explicado, que alcanzarían los 4 o 5 metros, similares a las de un temporal de levante fuerte, que podrían ser asumidas por los recursos de la Ciudad. De producirse en la zona de Cádiz, algo que ya ha sucedido en el pasado, ha recordado el ponente, la costa de la Bahía Norte ejercería de escollera.

No ha olvidado José Antonio Méndez los riesgos de transporte, no los motivados por las mercancías peligrosas o la actividad industrial, pero ha prestado especial atención a los motivados por la acción del hombre, desde los derivados de las concentraciones humanas, como conciertos, cabalgatas o eventos deportivos, a los motivados por intoxicaciones o epidemias, cuyo ejemplo más claro ha sido la pandemia, en los que la información a los ciudadanos es vital, que sepan que está pasando es clave, ha recordado, para que puedan autoprotegerse.

En este sentido, en el nuevo PLATERCE se ha incorporado el sistema de aviso masivo a la población que permite mandar mensajes de alerta a todos los terminales móviles, tanto a los habitantes de toda la ciudad como a los de un sector concreto de la misma. El contenido de ese mensaje lo determina el director del plan junto con los técnicos y se trata de un avance fundamental en situaciones graves, en las que se puede mantener informada a la población de forma puntual.

Otro de los riesgos a tener muy en cuenta en la ciudad es el que tiene que ver con los incendios, que al igual que sucede con las inundaciones, tiene su propio plan en el marco del PLATERCE. Se trata de uno de los riesgos a los que la ciudad ha tenido que hacer frente con mayor asiduidad durante los últimos años, dejando, por ejemplo, el pasado mes de septiembre, la mayor superficie quemada de la historia reciente.

Finalmente, uno de los riesgos que añade este plan, que no estaba recogido en el anterior, es el relacionado con las entradas masivas de inmigrantes. Los sucesos del 17 de mayo de 2021 quedaron marcados a fuego entre la ciudadanía, con 12.000 personas accediendo a la ciudad de forma irregular, 1.500 de ellos menores a los que había que acoger y proteger sin que la Ciudad contara con los recursos necesarios para ello. 

Para todos estos riesgos, ha explicado, se han desarrollado las acciones necesarias con un único fin, paliar las consecuencias de unas situaciones impredecibles pero ante las que hay que estar preparados.

Temporales, inundaciones, terremotos o inmigración masiva, entre los riesgos recogidos...