Max (HBO) nos permite con su distribución en España tener acceso a una serie que comenzó en 2021 y cuyas tres temporadas en clave de comedia ácida con toque dramáticos y de denuncia social, bien podrían ser un estupendo plan para pasar un buen rato veraniego-vacacional, bastante más barato que otras muchas opciones. Tomen nota por si acaso.
The Outlaws es una serie británica, auspiciada por la BBC, ambas circunstancias ya son siempre buenos presagios, permitan el homenaje a Neil Gaiman y Terry Pratchett, con un estilo especialmente británico, ambientación suburbial y un planteamiento más que interesante. Menos conocida de lo que merece, ha sido nominada a los premios BAFTA en las categorías de Mejor guion de TV- Comedia, y Mejor actor principal en TV - Comedia (Stephen Merchant).
La historia coloca en escena a siete desconocidos muy variopintos y diferentes, que son obligados a cumplir una condena de servicios a la comunidad en Bristol. A medida que sus nuevas circunstancias se van complicando, no tienen más remedio que reinventarse para sobrevivir, y esto los llevará a convertirse en un grupo unido a pesar de sus diferencias para no perderse por el camino. El enredo será constante, y las peligrosas amistades y los trapicheos de los bajos fondos harán su acto de presencia, especialmente en el lío monumental en el que se van metiendo a medida que avanza una segunda temporada sorprendente (cuando parecía que el producto se había agotado con la primera y la trama no daba para más) mejor aún que la primera. Pero el inteligente planteamiento y el ingenioso guión, no sólo logran que la segunda entrega sea procedente, sino que también nos permite disfrutar de una tercera con la sensación de vitalidad y ácida diversión marca de la casa.
Tremendamente divertida y hábilmente elaborada, posee su mayor fortaleza en unos personajes bien trazados, que se complementan a la perfección y cuya interrelación (y evolución de la misma) se antoja la clave de la historia desde el primer capítulo de la primera temporada. El reparto, británico en su mayoría tan hasta la médula que el resto de los elementos de la serie, está muy a la altura de las circunstancias, aunque precisa y paradójicamente, el veterano actor neoyorkino Christopher Walken es el rostro más reconocible, y que mejor “vende” el producto a nivel internacional.
La propuesta posee una cara amable de humor tan inteligente como igualmente amable… hasta que te arrea una bofetada de oscuridad que te deja desconcertado, para volver a bajar el tono buscando que el respetable baje la guardia en busca de otro golpe que te mande a la lona. Su solidez, su humor y su ingenio no les dejará indiferentes.
JUAN CARRASCO DE LAS HERAS → [email protected]