Ganado más que a pulso, Dexter tiene el honor de ser uno de los mejores personajes en general y antihéroes en particular del mundo audiovisual. Reinó durante años en la parrilla con una serie fresca, tan divertida como turbadora, tan interesante como bien hilvanada, tan adictiva como brutal, con protagonistas bien trazados y enemigos a la altura del producto. Y duró el idilio con el público y el efecto fan hasta sus últimas temporadas, en la que el guion fue haciendo aguas y todo se fue yendo a pique con claras muestra de agotamiento, de falta de ideas originales, ausencia de golpes de efecto sorprendentes, cayendo indignamente en un delirio argumental que acabó la trama y cerró la serie en su punto más bajo.
Poco era pues el riesgo de retomar el mítico asesino en serie con código moral, pero tampoco era sencillo el hecho de recuperar brillos perdidos. Dexter: New Blood tiene doble sentido, porque además de poner al protagonista, como si no hubiesen transcurrido diez años desde el punto y final de la trama en la serie originaria, en tener que volver a las andadas, reaparece en su vida la sangre joven y fresca de un hijo ya crecidito que creía ya perdido y que viene a animarle un poquito el día a día, y a remover viejas historias.
Michael C. Hall está en su salsa encarnando nuevamente el personaje que más éxito le ha dado a su carrera, y los seguidores del mismo sentirán, como el intérprete, que no ha pasado el tiempo, hecho que supone sin duda una tremenda virtud.
En esta ocasión, Dexter se reconcilia con el espectador veterano, en España de la mano de Movistar+, en formato de miniserie de 10 episodios, y probablemente dejará con ganas de más a las generaciones que lo vean por primera vez. No obstante, se nota en el producto que es heredero de otra manera de hacer series, que dista de lo que nos ofrecen todas las plataformas (y ello no supone necesariamente ni una ventaja ni tampoco un inconveniente, sencillamente la hace distinta). A los ingredientes con éxito de siempre le sumamos una ambientación gélida y atractiva muy alejada del cálido Miami, un adversario de nivel y una policía que es más que una chica lista y que le va a poner en apuros con total seguridad.
Puede con bastante lógica uno pensar que una historia protagonizada por un asesino en serie no parece lo más indicado como recomendación en estas fechas, pero como bien sabrán a estas alturas, no soy muy dado a ver temática navideña porque es lo que toca y me parece divertido ir relativamente a contracorriente en mi recomendación semanal. Además, la serie hace precisamente ese alarde de sentido del humor ambientando las andanzas de Dexter precisamente en época de navidad. Como un buen asesinato perfecto, todo encaja…
JUAN CARRASCO DE LAS HERAS → [email protected]