martes. 23.04.2024

1º de Mayo. Día Internacional del Trabajo

En este 1º de mayo, Día Internacional del Trabajo, queremos en primer lugar hacer un homenaje a todos los trabajadores y trabajadoras que, durante estos dos años de pandemia, han estado prestando sus servicios de forma incansable para hacer que nuestra vida fuera lo más parecida posible a la etapa anterior a la aparición del covid-19. Ahora que, gracias al éxito de la vacunación masiva, empezamos a convivir con el virus y a recuperar la actividad económica y social casi con total normalidad, creemos que es imprescindible reconocer y no olvidar la labor de tantas personas que pusieron en riesgo su salud y su vida para que el resto del país siguiera adelante. En este año 2022, y pese a la situación de incertidumbre generada por la guerra de Ucrania, acción que condenamos enérgicamente y por la que mostramos nuestra solidaridad con el pueblo ucraniano, podemos decir que los trabajadores y trabajadoras de nuestro país disfrutan hoy de mejores condiciones laborales que hace dos años. Hemos atravesado por circunstancias excepcionales y el Gobierno de España ha sabido responder, protegiendo a nuestros trabajadores y trabajadoras para que nadie se quede atrás. En este sentido, la aprobación de la reforma laboral ha supuesto un salto cualitativo en la calidad del empleo de nuestro país, no sólo porque por fin hemos dejado atrás los desequilibrios en las relaciones laborales que ocasionó la reforma laboral del PP, recuperando derechos que habían sido arrebatados, sino también porque se apuesta de una vez por todas por la contratación indefinida, limitándose la contratación temporal sólo para circunstancias puntuales. Gracias a esta apuesta por la estabilidad en el empleo, cerca de 13 millones de personas en nuestro país trabajan hoy con un contrato indefinido, según los últimos datos de la EPA, lo que supone la cifra más elevada de la serie histórica. Además, tras el fin de la pandemia, la recuperación de la actividad económica se está traduciendo en un enorme dinamismo del mercado laboral, superándose la barrera de los 20 millones de ocupados. Es justo reconocer que no hubiera sido posible llegar a esta cifra sin el esfuerzo que ha realizado el Gobierno a lo largo de toda la crisis sanitaria, aprobando medidas para proteger el empleo y ayudas a los diferentes sectores económicos. Es en este momento cuando podemos apreciar la importancia que los ERTE han tenido durante todo este proceso, no sólo para garantizar las rentas a una parte importante de la población en los momentos más complicados, sino también una vez que ha pasado lo peor de la pandemia, para volver a un mercado laboral que tiene músculo para encauzar la recuperación.

 

 

En este 1º de mayo, Día Internacional del Trabajo, queremos en primer lugar hacer un homenaje a todos los trabajadores y trabajadoras que, durante estos dos años de pandemia, han estado prestando sus servicios de forma incansable para hacer que nuestra vida fuera lo más parecida posible a la etapa anterior a la aparición del covid-19. Ahora que, gracias al éxito de la vacunación masiva, empezamos a convivir con el virus y a recuperar la actividad económica y social casi con total normalidad, creemos que es imprescindible reconocer y no olvidar la labor de tantas personas que pusieron en riesgo su salud y su vida para que el resto del país siguiera adelante. En este año 2022, y pese a la situación de incertidumbre generada por la guerra de Ucrania, acción que condenamos enérgicamente y por la que mostramos nuestra solidaridad con el pueblo ucraniano, podemos decir que los trabajadores y trabajadoras de nuestro país disfrutan hoy de mejores condiciones laborales que hace dos años. Hemos atravesado por circunstancias excepcionales y el Gobierno de España ha sabido responder, protegiendo a nuestros trabajadores y trabajadoras para que nadie se quede atrás. En este sentido, la aprobación de la reforma laboral ha supuesto un salto cualitativo en la calidad del empleo de nuestro país, no sólo porque por fin hemos dejado atrás los desequilibrios en las relaciones laborales que ocasionó la reforma laboral del PP, recuperando derechos que habían sido arrebatados, sino también porque se apuesta de una vez por todas por la contratación indefinida, limitándose la contratación temporal sólo para circunstancias puntuales. Gracias a esta apuesta por la estabilidad en el empleo, cerca de 13 millones de personas en nuestro país trabajan hoy con un contrato indefinido, según los últimos datos de la EPA, lo que supone la cifra más elevada de la serie histórica. Además, tras el fin de la pandemia, la recuperación de la actividad económica se está traduciendo en un enorme dinamismo del mercado laboral, superándose la barrera de los 20 millones de ocupados. Es justo reconocer que no hubiera sido posible llegar a esta cifra sin el esfuerzo que ha realizado el Gobierno a lo largo de toda la crisis sanitaria, aprobando medidas para proteger el empleo y ayudas a los diferentes sectores económicos. Es en este momento cuando podemos apreciar la importancia que los ERTE han tenido durante todo este proceso, no sólo para garantizar las rentas a una parte importante de la población en los momentos más complicados, sino también una vez que ha pasado lo peor de la pandemia, para volver a un mercado laboral que tiene músculo para encauzar la recuperación.

 

Quedan muchos retos pendientes para los próximos meses: la aprobación del Estatuto del Becario, la ratificación del Convenio 189 de la OIT sobre trabajo doméstico, en la línea de seguir dignificando las condiciones de trabajo de las personas trabajadoras, y seguir avanzando en la Componente 23 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, con el objetivo de modernizar y hacer más inclusivo nuestro mercado laboral. Una vez más, los y las socialistas seguiremos celebrando el 1º de Mayo con el compromiso seguir trabajando para lograr más y mejor empleo. ¡VIVA EL 1º DE MAYO!

1º de Mayo. Día Internacional del Trabajo