El Club Natación Caballa ha celebrado este domingo un día de convivencia en el Club, al que estaban invitados todos los jugadores, así como sus padres.
El plan era pasar el día juntos, jugando waterpolo y comiendo paella en familia. Ha comenzado a las 12.00 y según ha explicado Peter Kubiscko, director técnico del equipo, la primera actividad ha sido un entrenamiento conjunto de los más peques dirigido por los jugadores del equipo de División de Honor.
A partir de las 13.00 han comenzado a disputar dos partidos, a media piscina, entre padres y madres contra jugadores de los equipos benjamín, alevín e infantil. Un partido que, en palabras de Kubiscko, "ha quedado en tablas, como no podía ser de otra manera" puesto que lo importante era disfrutar juntos de este deporte.
El director técnico ha explicado que el objetivo de esta convivencia era construir comunidad, pasarlo bien y pare el primer equipo de División de Honor, hacerse sentir que tienen todo un club por detrás que le apoya y con los que tienen una responsabilidad.
El CN Caballas ha señalado que el equipo está haciendo las cosas bien y que como objetivos para el año que empieza esta seguir trabajando para lograr un progreso y más éxitos.
La jornada ha concluido con una paella familiar para todos, habiendo encargado unas 120 raciones para compartir la comida y disfrutar, ahora, en otro ambiente más cómodo.