INCENDIO EN GARCÍA ALDAVE

Apocalipsis, día uno: Bomberos exhaustos, curiosos y García Aldave cubierta de ceniza

Superficie quemada / Juanjo Coronado

Apocalíptico. No cabe describir de otra manera el paisaje, una vez transcurrida la noche, que ha quedado en García Aldave. Curiosos, bomberos exhaustos y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias y la Guardia Civil estaban desplegados sobre la zona aún avanzado el día.

"Nunca había visto esto en todos los años de servicio", comentaba fuera de micrófono uno de los miembros más veteranos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento. "Es increíble". El lugar es el Mirador de Isabel II: a escasos metros del lugar, otros bomberos se recuperan de una noche "infernal". Algunos hacen ejercicios de recuperación muscular: esta escena ocurre sobre las 12.00 y la larga -y tensa- noche comienza a pasar factura. Otros duermen, se fuman el primer cigarro en más de un día o sencillamente reflexionan en voz alta. "Anoche pudo pasar una tragedia", nos dice uno.

"Me hubiera gustado que hubieseis podido escuchar la emisora: hubo momentos en los que algunos de nuestros compañeros sintieron verdadero miedo", nos decía a un grupo de periodistas mientras trataba de refrescarse echándose dos litros de agua por encima de la cabeza.

Árboles quemados junto al mirador de Isabel II/ Juanjo Coronado

Mientras, algunos de ellos no evitaban las críticas "a que solo hayamos tenido un retén de bomberos de tres personas para todos los montes durante el verano, o a que algunos de nuestros vehículos tengan más de veinte años". Al tiempo, y conforme las autoridades comienzan a dejar que la circulación por la zona comience a restablecerse, empiezan a llegar los curiosos.

Un bombero observa el panorama/ Juanjo Coronado

Al mirador de Isabel II algunos se acercan a los Bomberos, simplemente para dar las gracias  por su trabajo a los Bomberos. Otros traen a gente de fuera, amigos peninsulares a los que el incendio ha sorprendido en Ceuta. Se los presentan: "los mejores bomberos de España, ahí los tenéis".

Un grupo de Bomberos descansa tras la larga noche/ Juanjo Coronado

Eso es en Isabel II. Metros más abajo, junto a la IV Bandera la Unidad Militar de Emergencias se emplea a fondo para sortear alguna pequeña llama que aparece de cuando en cuando. "No es problema", dice un bombero. "Todo lo de alrededor está quemado: no tiene superficie para extenderse".

 

A unos metros, frente a las pistas deportivas de la Legión y en el acceso a la pista de tiro, los periodistas creemos haber encontrado el sitio adecuado para hacer fotos y tomar imágenes con cierta tranquilidad. Pero empiezan a llegar curiosos, minutos antes de que la Guardia Civil -con buen criterio- desaloje la zona. "Tanto coche puede impedir el paso de los vehículos de emergencia. La foto más buscada, por supuesto, la del hidroavión o el helicóptero.

Un helicóptero lanza agua sobre el Monte de la Tortuga / Juanjo Coronado

El calor es asfixiante. A mediodía, mientras la situación es oficialmente de fuego perimetrado, los Bomberos reciben un último encargo. Una pequeña columna de humo comienza metros abajo del mirador. Vuelta a empezar...

Camión de Bomberos durante una intervención / Juanjo Coronado