El Banco de Alimentos ha marcado hoy un hito significativo al colocar la primera piedra de su nueva nave, que se convertirá en un punto de referencia para la institución en su labor de apoyo a las personas necesitadas. La construcción de esta nave, cuyo plazo de ejecución está estimado en un año, supondrá una expansión de las instalaciones actuales y permitirá al Banco aumentar su capacidad de ayuda a la comunidad.
Pedro Mariscal, presidente del Banco de Alimentos, hizo hincapié en la importancia de esta nueva etapa, destacando que hasta ahora se encontraban en una especie de "burbuja" que limitaba su potencial. Llamando a este período "Tarot", en referencia a la densa niebla que suele aparecer en Ceuta durante agosto, Mariscal explicó que el proyecto comenzó con la adquisición de un terreno de 1508 metros cuadrados gracias a la colaboración de la Autoridad Portuaria.
El presidente del Banco también expresó su agradecimiento al alcalde de la ciudad, Juan Vivas, y a Juan Gutiérrez por su apoyo financiero, que permitió asegurar los primeros 300.000 € para el proyecto. Además, destacó la colaboración de todos los partidos políticos y la comunidad en general, enfatizando que el Banco de Alimentos es una entidad apolítica y sin creencias religiosas, cuyo objetivo principal es brindar asistencia alimentaria a aquellos que la necesitan.
En cuanto a los plazos, Mariscal explicó que la fase más compleja es la cimentación debido a que el terreno fue ganado al mar. Se deben construir micropilotes y pilotes para garantizar la estabilidad de la estructura. Una vez completada esta fase, se estima que la construcción de la nave en sí tomará alrededor de nueve o diez meses. El objetivo es tenerla operativa en un año, lo que permitirá recibir camiones y aumentar la capacidad de almacenamiento de alimentos.
La arquitecta Judit A. Albiñana, responsable del proyecto, explicó que la nave se diseñó para resolver los problemas actuales del Banco de Alimentos, como la falta de espacio y la falta de capacidad de almacenamiento refrigerado. Con una superficie de casi 800 metros cuadrados y una altura de ocho metros, la nave contará con tres niveles de estanterías y dos cámaras grandes, una para congelación y otra para refrigeración de productos frescos.
Albiñana enfatizó que el diseño de la nave se basa en la funcionalidad y la eficiencia, con un flujo de acceso directo para la oficina y los trabajadores, así como un acceso fácil para las familias que acuden a recoger alimentos. Además, la ubicación privilegiada permitirá que los camiones lleguen directamente al almacén, agilizando el proceso de descarga y distribución de alimentos.
La nueva nave del Banco de Alimentos no solo aumentará su capacidad de almacenamiento y refrigeración, sino que también permitirá una mayor coordinación y colaboración con otras sedes del Banco de Alimentos en España. Con estas nuevas instalaciones, el Banco de Alimentos de Ceuta estará mejor equipado para enfrentar el desafío del hambre en la ciudad y brindar apoyo a las 18 asociaciones a las que actualmente atienden.
La construcción de la nueva nave es un hito importante en la historia del Banco de Alimentos de Ceuta. La solidaridad y el compromiso de la comunidad se han hecho evidentes en este proyecto, y se espera que en aproximadamente un año, la institución pueda inaugurar sus amplias y modernas instalaciones para continuar su valiosa labor de ayudar a quienes más lo necesitan.
