La sumisión química se ha convertido en los últimos meses en un auténtico quebradero de cabeza, ante el aumento de denuncias producidas en lugares con muchas aglomeraciones. El 'modus operandi' siempre es el mismo: una mujer nota un pinchazo y pierde la consciencia de sus actos, generalmente de noche y con mucha gente alrededor.
¿Cómo reaccionar, pues, ante estos casos?. Cuenta Miran Rivero, vicepresidenta de la Plataforma Feminista durante la instalación de un 'punto violeta' en el Campus que "muchas veces, el impulso nos lleva a llamar a la Policía o al vigilante de seguridad, pero eso es un error. Hay que acudir a las personas más cercanas que tengamos, porque no sabemos qué tiempo va a tardar en hacernos efecto la sustancia que nos han inyectado. Una vez estemos con nuestros allegados, lo importante es llamar al 112 y acudir al Centro de Salud o al Hospital más cercano".
Importante, para Rivero es "que nos hagan un análisis también serológico, para ver también si nos han transmitido algún tipo de enfermedad". En Ceuta, hasta el momento, no se ha registrado ningún caso de sumisión química, aunque en verano una chica denunció un pinchazo, pero sin llegar a tener rastros de sustancias químicas,durante las Fiestas Patronales.
Los 'puntos violetas' van a estar esta semana en distintos lugares de la Ciudad, coincidiendo con la celebración el próximo viernes del Día Internacional de Lucha contra la Violencia de Género. La 'última parada' será en la matinal del sábado, en el Paseo del Revellín. Hoy han comenzado entregando mochilas y dípticos a los estudiantes en el Campus Universitario 'Manuel Olivencia'.