Lluvia en pleno agosto. Una finísima lluvia pero que ha caído con constancia durante algo más de una hora. Un hecho inusual que ha sorprendido a muchos.
La llovizna, sin embargo, no ha producido una bajada de las temperaturas apreciable y en muchos casos, ni siquiera ha trastornado demasiado la velada de los ceutíes que han preferido sacar un paraguas y seguir disfrutando de los últimos días del mes en las terrazas.
Algunos vecinos han tenido que apresurarse a recoger la ropa de los tendederos, siendo este el máximo trastorno que han sufrido los ceutíes. Incluso algunos han agradecido que haya caído un poco de agua para aliviar, aunque sea momentáneamente, el calor.
Aunque la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología anunciaba la posibilidad de precipitaciones leves estos pasados días, el acierto ha llegado con un poco de retraso. AEMET anuncia para mañana cielos despejados, por lo que, si la previsión es correcta, esta lluvia habrá sido la única de que caerá en la ciudad hasta que llegue el otoño.
