Ceuta lleva desde ayer envuelta en una densa capa de polvo marrón. Este fenómeno meteorológico, aunque no infrecuente en la región, suscita interrogantes sobre sus causas y consecuencias.
Expertos meteorológicos señalan que la presencia de esta densa capa de polvo en el aire se debe a una combinación de factores naturales y antropogénicos. Uno de los principales desencadenantes es la presencia de vientos de componente sur que transportan partículas de polvo desde el norte de África, especialmente del desierto del Sáhara, hacia la península ibérica y el sur de Europa. Este fenómeno, conocido como la "calima", es común en la región y puede ocurrir varias veces al año.
La sequedad del aire y la ausencia de precipitaciones también contribuyen a la acumulación de polvo en la atmósfera, ya que no hay lluvia que pueda lavar las partículas suspendidas en el aire. Además, actividades humanas como la deforestación, la agricultura intensiva y la urbanización pueden aumentar la cantidad de polvo en suspensión, exacerbando el problema de la contaminación atmosférica.
Aunque este fenómeno meteorológico no representa un peligro inmediato para la salud, la exposición prolongada al polvo puede tener efectos adversos, especialmente en personas con problemas respiratorios o alergias. Por ello, se recomienda evitar la exposición al aire libre durante periodos de alta concentración de polvo y tomar precauciones adicionales, como usar mascarillas protectoras si es necesario.
El polvo que cubre Ceuta de una densa capa marrón es resultado de la combinación de factores naturales y antropogénicos, siendo un fenómeno común en la región debido a la presencia de vientos que transportan partículas de polvo desde el desierto del Sáhara y la ausencia de precipitaciones que puedan limpiar el aire. Aunque no representa un peligro inmediato, es importante tomar precauciones para proteger la salud pública.
