La esperada procesión de la Virgen de África ha dado comienzo a las 20.30, atrayendo a una multitud de fieles y devotos a las puertas del Santuario de la Alcaldesa Perpetua. Los ciudadanos de Ceuta han mostrado una vez más su fervor y cariño hacia su patrona, dispuestos a acompañarla en todo su recorrido por las calles de la ciudad.
El cortejo procesional ha seguido su camino, llevando a la Virgen de África por el Paseo de las Palmeras hasta llegar a la Plaza de la Constitución. En cada paso de la procesión, se podía sentir la devoción y la emoción de los presentes, que no han dudado en mostrar su respeto y veneración hacia la protectora de la ciudad.
Como es habitual la procesión ha continuado por Victori Goñalons, pasando junto al mercado central para girar en dirección hacia la Catedral, a través de la calle Jaudenes.
Un tramo especialmente significativo, como cada año, ya que se ha visto marcado por las tradicionales petaladas en honor a la Virgen. Los devotos han lanzado pétalos de flores al paso de la imagen, creando un espectáculo hermoso y conmovedor que ha simbolizado el amor y la gratitud hacia su patrona.
Además, las saetas, canciones dedicadas a la Virgen, han resonado desde los edificios a lo largo de la calle Jaudenes, llenando el ambiente de un sentimiento de profunda espiritualidad y devoción. Estas saetas, interpretadas con gran pasión y entrega, han sido otro elemento destacado de la procesión que ha conmovido a los asistentes, especialmente con el estribillo "ella es la dueña de Ceuta, y ella es la que manda aquí" de los Casellas en su clásica interpretación al paso de la imagen.
La procesión de la Virgen de Africa es un evento anual que une a la comunidad ceutí en torno a su patrona y protectora. Cada año, los ciudadanos de Ceuta se congregan para rendir homenaje y mostrar su gratitud a la Virgen, una tradición que ha sido transmitida de generación en generación y que sigue siendo un pilar importante en la vida religiosa y cultural de la ciudad.
En medio de un ambiente de respeto, fe y emoción, la procesión de la Virgen de Africa ha dejado una vez más una huella indeleble en el corazón de los ceutíes. La protectora de la ciudad ha sido venerada con fervor y cariño, demostrando que la devoción a la Virgen sigue siendo un lazo que une a la comunidad en un espíritu de unidad y esperanza.
Un momento significativo que marca, también el final de las Fiestas Patronales que concluirán esta noche.