En una noche en la que la visibilidad era casi nula, la Feria 2024 continuó con su vibrante vida. Entre las casetas que brillaron con luz propia, destacó la de Los Remedios, un retorno esperado tras 12 años de ausencia. Esta caseta, como tantas otras, surge para recaudar fondos para la cofradía, ofreciendo comida casera elaborada por fieles y familiares. Pese a debutar este año, los organizadores están muy satisfechos con la acogida del público y el desempeño logrado hasta ahora. Esperan que este sábado y el domingo, con la afluencia de fieles tras la ofrenda floral a la Virgen, se conviertan en las veladas más concurridas y exitosas.
Por otro lado, la Caseta de los Peregrinos, conocida por sus tortitas de camarones al estilo sanluqueño, sigue siendo un punto de referencia gastronómico en la Feria. Esta caseta, que recauda fondos para sufragar peregrinaciones y actividades de evangelización, ha ganado una popularidad inmensa en los últimos años. Las tortitas, preparadas con una fórmula secreta de harina de trigo y garbanzos, acompañada de camarones frescos, se han convertido en un plato casi obligatorio para los asistentes.
Finalmente, no se puede abandonar la Feria sin detenerse en los clásicos Gofres Emi. Situados estratégicamente en la cuesta de salida, el aroma dulce de estos gofres es un reclamo irresistible. Con una presencia ininterrumpida en nuestras fiestas desde hace 47 años, han conquistado a varias generaciones, siendo imposible pronunciar su nombre sin evocar el eco familiar de la megafonía que los anuncia.
Tres paradas imprescindibles en nuestra feria, que ya se han convertido en una tradición, y que prometen seguir deleitándonos por muchos años más. La Feria 2024, a pesar de la niebla, brilla con la luz de su gente y sus costumbres, dejando claro que la celebración y la devoción van de la mano en esta tierra.