TRACE ha sido objeto de una denuncia por parte del sindicato UGT debido a su “falta de interés y respuesta” frente a una importante solicitud del comité de empresa. Los trabajadores han expresado su preocupación por la precaria situación en la que se encuentran debido a la falta de taquillas y la necesidad de ampliar los vestuarios en sus instalaciones.
Abdelkader Abdeselam, secretario del comité de empresa y delegado sindical de UGT, ha sido el portavoz de los trabajadores en esta cuestión. Según sus declaraciones, el cuartillo que anteriormente albergaba a unos 20 operarios del turno de mañana, tarde y fines de semana indefinidos, tuvo que ser cerrado tras denuncias sobre su mal estado. Tras el arreglo del cuartillo, la empresa decidió cerrarlo debido a su negativa a asumir los gastos de alquiler, afectando gravemente a los empleados que dependían de este espacio para guardar sus pertenencias.
La falta de taquillas y vestuarios adecuados ha llevado a los trabajadores a desplazarse en los vehículos de la empresa sin contar con un espacio seguro para guardar sus pertenencias. Esta situación no solo afecta la comodidad y bienestar de los empleados, sino que también incrementa los riesgos de tropiezos o resbalones al bajar y subir los carros en los vehículos.
El problema se agrava en la temporada de verano, donde los operarios se ven obligados a esperar en la base hasta que se les lleve a su destino de trabajo. Sin embargo, la preocupación aumenta ante la llegada de las lluvias, el frío y el viento, lo que dificultará aún más la situación de los trabajadores.
Ante esta problemática, el comité de empresa espera que la inspección tome cartas en el asunto y ordene la ampliación de vestuarios y la instalación de taquillas para todos los trabajadores. Sin embargo, hasta el momento no han recibido ninguna respuesta por parte de la empresa ni de la inspección, lo que aumenta la preocupación de los empleados respecto a sus derechos laborales y comodidades en el trabajo.
