"Si Cristiano da el pase hacia atrás, es gol fijo". Lo reconoce entre dientes un miembro de la Gran Peña Barcelonista de Ceuta, en Bermudo Soriano, tras una jugada en la que el portugués intenta disparar a puerta en vez de cedérsela a algún compañero mejor situado. Otro, "pinche" de Rafael Fontalba -presidente de los 'culés' ceutíes y reputado cocinero- pronostica en la primera mitad el 0-3 final. La Peña comienza su actividad a las diez de la mañana; Fontalba asume que a el le toca, una vez más, preparar las viandas para el descanso. Huevos fritos con chorizo, lo que da lugar a algún chiste perfectamente previsible sobre el menú y la cantidad. En la Peña -con sala para fumadores y no fumadores-, destacan fotos firmadas de Diego Maradona, Nicolas Casaus o Hristo Stoichkov, pregonero de la Trobada Mundial de 2001 celebrada en Ceuta. Una peña en la que, nos cuenta su presidente, se ha notado el extraño horario -13.00- del clásico. Cosas de la globalización
Si dejamos en la Peña Barcelonista un ambiente de optimismo, la madridista (Calle Echegaray, frente al Templo Hindú), es un auténtico funeral. Luis Suárez y Lionel Messi, nunca antes un uruguayo y un argentino confraternizaron tanto, motivan que el personal se vaya marchando antes de tiempo. El madridismo ceutí clama contra dos manos no pitadas y contra la ineficacia blanca en el primer tiempo. Manuel, uno de los madridistas más longevos, reconoce la superioridad blaugrana justo en el momento en que Messi pone el tercero en el marcador.
En número de socios, la Peña Madridista -con fotografías de todos los presidentes blancos desde Bernabéu en adelante y de varios futbolistas 'merengues' dedicadas- supera a la blaugrana. Sueñan, confiesa alguno, con albergar algún día un encuentro de peñistas blancos. Pero nos dicen que es un sueño casi convertido en quimera. Cosas del poderoso caballero...
