En un mundo cada vez más dividido por conflictos y diferencias, Ceuta se convierte en el epicentro de un evento cultural que desafía las barreras y celebra la unidad a través de la música. La edición 2024 de la CISO (Ceuta International Symphony Orchestra) no solo se presenta como un concierto, sino como una manifestación de lo que puede lograr el arte cuando se emplea como herramienta de conexión humana. Eduardo Hernández, uno de los impulsores del proyecto, no puede ocultar su entusiasmo al hablar de lo que la CISO traerá este año.
"Sobre todo, creo que lo más especial de esta edición es la mezcla de nacionalidades", dice Hernández, destacando un hecho que no pasa desapercibido: "Que la CISO sea capaz de juntar en un mismo espacio a músicos rusos y ucranianos y que, de alguna manera, haya un entendimiento maravilloso, es algo que deberíamos valorar profundamente. Los pueblos nada tienen que ver con los intereses políticos de sus dirigentes".
La programación de este año se presenta como un verdadero festín para los amantes de la música, con una oferta que incluye tanto piezas clásicas como icónicas bandas sonoras del cine. El evento final, previsto para el 1 de septiembre a las 20.00 en el Teatro Auditorio del Revellín, será una celebración de la música en todas sus formas. "Es un programa súper atractivo", comenta Hernández, quien promete que el teatro se llenará de un ambiente de concierto espectacular.
Uno de los momentos más esperados es el concierto dedicado a la música de cine. Entre las obras destacadas se encuentra el segundo concierto para piano de Rachmaninov, una pieza que, aunque menos conocida como banda sonora, dejó su huella en el cine en "La tentación vive arriba", protagonizada por Marilyn Monroe y Tom Ewell. "Es un drama, una comedia melancólica", describe Hernández. "La sonoridad sinfónica de esta obra es precursora de todo lo que vendrá después en la música cinematográfica, las grandes bandas sonoras".
Pero no solo los clásicos tendrán cabida en este evento. Piezas archiconocidas como las de "Parque Jurásico" son un recordatorio de que la música popular ha traspasado las barreras del cine para instalarse en la memoria colectiva. "Es música que todos llevamos en la oreja, hayamos visto o no las películas", añade Hernández.
La CISO no es solo un proyecto musical; es una iniciativa que busca impactar positivamente en la ciudad de Ceuta. Con la colaboración de la Federación de Asociaciones de Vecinos, la organización espera que este evento sea una verdadera fiesta para todos los ceutíes. "Queremos llegar a cuanta más gente mejor. No es un concierto para entendidos, sino para disfrutar en familia. Es una fiesta de todos los ceutíes", insiste Hernández.
El proyecto cuenta con la participación de músicos de todo el mundo, incluyendo figuras destacadas como Simón Boix, solista de chelo de la Orquesta del Teatro Real, y Edmon Levon, quien regresa por cuarta o quinta vez a Ceuta. Levon, director, comparte su entusiasmo por el programa de este año, que mezcla la música clásica con bandas sonoras. "Este año hemos decidido hacer una mezcla. Empezamos con Rachmaninov y luego continuamos con bandas sonoras que son un deleite tanto para el público como para la orquesta", explica Levon. Entre sus favoritas, menciona la banda sonora de "Jurassic Park" y "Aladdin", describiendo esta última como "una fiesta tremenda que creo que encantará al público".
La edición 2024 de la CISO es más que un simple evento cultural. Es una manifestación del poder de la música para unir a personas de diferentes orígenes y demostrar que, a pesar de las divisiones que puedan existir en el mundo, el arte sigue siendo un lenguaje universal. La participación de músicos de nueve nacionalidades y la colaboración con artistas locales refuerzan el mensaje de convivencia y diversidad.
Al final, lo que queda claro es que la CISO es un faro cultural en Ceuta, un evento que no solo destaca por su calidad artística, sino por su capacidad para conectar a la comunidad y ofrecer una experiencia humana única. "La cultura tiene ese papel sanador", reflexiona Hernández. "Nos ayuda a asimilar las problemáticas del día a día y nos aferra a la belleza, a la conexión entre seres humanos sin pantallas, sin barreras. Esto es una experiencia de primera categoría que nada puede sustituir".
La CISO 2024 promete ser uno de los eventos más destacados del año en Ceuta, una celebración de la diversidad y la excelencia musical que resonará en la memoria de todos aquellos que tengan la suerte de asistir
Pero la CISO 2024 no se limita a los conciertos en el teatro. Este año, por primera vez, se han organizado una serie de actividades adicionales que buscan acercar la música a diferentes sectores de la ciudad. Uno de los puntos destacados fue el concierto con solistas locales en la Biblioteca Pública de Ceuta, un espacio más íntimo donde los músicos ceutíes tuvieron la oportunidad de brillar. “Es un momento muy especial para nosotros”, comenta Hernández, “porque se trata de dar visibilidad al talento local en un marco que fomenta el encuentro y el aprendizaje mutuo”.
Hernández enfatiza que la CISO celebra la diversidad cultural a través de la música, un lenguaje que todos pueden entender y disfrutar. "Es un proyecto que no solo tiene que ver con la música, sino con lo que representa para la ciudad: una oportunidad para que las diferentes comunidades se unan en torno a algo hermoso", afirma.
En diversas ediciones, la CISO ha logrado atraer a músicos de todos los rincones del mundo, incluyendo a un mexicano residente en Montreal, un croata, varios portugueses y un grupo significativo de músicos españoles. La inclusión de un solista de la talla de Simón Boix es una prueba más del alto nivel artístico que caracteriza a este evento. Boix, quien forma parte de la Orquesta del Teatro Real, ha decidido unirse a este encuentro en Ceuta, dejando de lado otros compromisos para poder participar. “Es un honor contar con él”, dice Hernández, “y su presencia es un testimonio del prestigio que ha adquirido la CISO en el circuito internacional”.
Entre los músicos ceutíes que forman parte del proyecto, Hernández menciona a Tamara Jiménez y Manuel Bancalero, quienes son piezas clave en la producción del evento. Ana Vega, una talentosa pianista que acaba de concluir sus estudios en el Conservatorio de Ceuta, también se destaca en el equipo. Hernández no oculta su orgullo al hablar de la contribución de todos ellos: “Es un privilegio poder trabajar con gente tan comprometida y talentosa”.
El proyecto también ha servido como plataforma para jóvenes promesas de la música. Es el caso de Rodrigo Sánchez Menchén, un joven ceutí cuya carta de recomendación para ingresar en una prestigiosa universidad en Estados Unidos fue respaldada por la CISO. “Estamos súper orgullosos de apoyar su candidatura”, comenta Hernández. “Queremos pensar que nuestro respaldo ha pesado en su aceptación y esperamos poder colaborar con él en futuras ediciones”.
El concierto inaugural, al igual que el resto de actividades, promete ser una experiencia inolvidable, no solo por la calidad de las interpretaciones, sino por el mensaje que subyace en cada nota: la posibilidad de un mundo mejor, donde las diferencias culturales se celebren en lugar de dividirnos. “Esto es lo que queremos que la gente se lleve a casa”, concluye Hernández, “que la música tiene el poder de unirnos, de hacernos sentir más humanos, más conectados con los demás, independientemente de nuestras diferencias”.
Levon, con su enfoque meticuloso y su pasión por la música, ha logrado que cada ensayo sea una celebración del talento. Su capacidad para manejar la complejidad rítmica de obras como el Concierto para Piano número II de Rajmáninov, y su habilidad para convertir un conjunto diverso de músicos en una orquesta cohesiva, son testimonio de su maestría. "El reto es siempre mantener la unidad, especialmente en piezas tan dinámicas como las que hemos elegido", explica Levon. "Pero cuando finalmente logramos esa sincronización perfecta, la recompensa es inmensa, tanto para nosotros como para el público".
Estos temas, que han trascendido las películas para convertirse en parte del imaginario colectivo, encontrarán nueva vida bajo la batuta de Levon, quien asegura que cada nota está pensada para resonar profundamente en los espectadores, independientemente de su trasfondo musical.
Además, el hecho de que la música de cine esté ocupando un lugar destacado en el programa no es casualidad. "Es una manera de conectar con el público en un nivel más visceral", afirma Levon. "La música de cine tiene esa capacidad de evocar emociones inmediatas porque está asociada a imágenes y narrativas que ya forman parte de nuestra memoria cultural. Queremos aprovechar eso para hacer de este concierto una experiencia memorable para todos".
Rodrigo Sánchez Menchén, un orgullo ceutí en la CISO
Rodrigo Sánchez Menchén, uno de los jóvenes talentos más prometedores de Ceuta, se ha convertido en una figura destacada dentro del panorama musical internacional, y su vinculación con la CISO es motivo de orgullo para su ciudad natal. A pesar de su juventud, Rodrigo ha demostrado una dedicación y un talento que le han llevado a ser admitido en el Bard College, una de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos, un logro para el cual la CISO ha jugado un papel fundamental.
Desde sus primeros pasos en la música, Rodrigo ha sido un estudiante brillante y apasionado. Su talento natural y su incansable esfuerzo lo han hecho merecedor de numerosos reconocimientos. Sin embargo, su vínculo con la CISO es particularmente significativo. No solo ha sido un participante activo en ediciones anteriores del festival, sino que también ha recibido el apoyo de la CISO para continuar su formación en el extranjero. Una de las cartas de recomendación clave para su admisión en la universidad fue emitida por este proyecto, un gesto que refleja el compromiso de la CISO con el desarrollo y la promoción de jóvenes músicos.
La historia de Rodrigo es un ejemplo inspirador de cómo el talento local puede florecer con el apoyo adecuado y cómo la CISO, más allá de ser un evento cultural, actúa como una plataforma de lanzamiento para jóvenes promesas. La comunidad ceutí espera con ansias el momento en que las fechas permitan a Rodrigo regresar a su ciudad para compartir nuevamente su música con el público que lo ha visto crecer.
Su éxito no solo es una victoria personal, sino también un testimonio del impacto positivo que proyectos como la CISO pueden tener en la vida de los jóvenes músicos. Con cada logro, Rodrigo lleva consigo el nombre de Ceuta y la influencia de la CISO, demostrando que el talento y la dedicación, cuando se apoyan con oportunidades y recursos, pueden llevar a logros extraordinarios.
La comunidad musical y cultural de Ceuta, así como la CISO, seguirán de cerca los pasos de Rodrigo Sánchez Menchén, sabiendo que su futuro en la música es tan brillante como su talento. Su historia continúa, y Ceuta lo espera con los brazos abiertos, orgullosa de uno de sus hijos más ilustres.