A nadie se le escapaba cuando Disney le compró a George Lucas su imperio de mercadotecnia, que no le estaban comprando simplemente acabar la serie de 9 entregas de la saga, y que Star Wars estaba adquiriendo una nueva dimensión, una nueva esperanza, permítanme el jugueteo terminológico, para aquellos que siempre quieren más.
Emparentada con Star Wars: Rebels con protagonista sacado de la serie de animación, y en la línea temporal de El Mandaloriano, Ahsoka es uno de esos personajes principales femeninos que se estilan por doquier, una guerrera de armas tomar, carismática, poderosa y encarnada por Rosario Dawson, una actriz a la altura de las circunstancias, que no son otras que una de las producciones más ambiciosas y de estilo cercano a las películas originarias.
Dawson destaca, mérito añadido, entre un más que interesante reparto, que cuenta en sus filas con nombres como los de Hayden Christensen haciendo de Anakin Skywalker, claro está, o un Ray Stevenson del que tenemos que pararnos a hablar. Esta ha sido una de las últimas apariciones del recientemente fallecido actor irlandés, y sirva como homenaje a su maravillosa trayectoria profesional, que enumeremos populares papeles en cine como los de Volstagg en Thor: Ragnarok o Frank Castle en Punisher: War Zone. Pero fue en televisión donde se hizo inolvidables su legado con papeles como los de “malo” de Dexter, Barbanegra en Black Sails (sublime), y, sobre todo, el gran Tito Pullo de la imprescindible serie Roma.
Volviendo a Ahsoka, se nos sitúa algo después de la caída del Imperio. La Aprendiz de Anakin Skywalker, Ahsoka Tano no siguió sus pasos metiéndose de bruces en el lado oscuro. Ahora busca al joven Jedi Ezra Bridger desaparecido en el hiperespacio cuando ambos combatían al malvado Gran Almirante Thrawn. Con ayuda de la mandaloriana Sabine Wran, Ahsoka se ha propuesto descifrar la ubicación de ambos. Pero, claro está, habrá peligrosos y siniestros obstáculos en el camino. Hasta ahí la sinopsis oficial, los personajes bien perfilados y la espectacularidad de las escenas de acción, más las mencionadas interpretaciones con personalidad y aplomo, son componentes básicos para que la serie funcione y atraiga, puesto que los sellos de identidad y el ingente presupuesto destinado a la propuesta se dan por más que sabidos y seguros.
Probablemente la trama no sea la más idónea por sus referencias varias para que algún marciano que nada sepa del universo “starwarsero” comience su periodo iniciativo de padawan, pero este spin-off merece su visionado en el rizar el rizo que supone la exitosa interconexión de las diferentes series de acción real y de animación de Disney+, con las entregas de la historia hechas para la gran pantalla. Y todo ello, como suele ocurrir en estas macroproducciones, salpimentada con grandes dosis de divertimento audiovisual que promete traer cola, y no me refiero al refresco que suele acompañar a las palomitas, que también…
JUAN CARRASCO DE LAS HERAS → [email protected]