De acuerdo a fuentes de bomberos, Ceuta se enfrenta a una preocupante situación de seguridad ciudadana, ya que “el retén de bomberos en el monte no estará disponible durante gran parte del periodo estival”. Los bomberos han expresado su negativa a aceptar esta reducción del retén, argumentando que “es inadmisible y pone en riesgo la seguridad de los trabajadores y de los ciudadanos”.
Hasta hace poco, el retén de bomberos en el monte comenzaba sus funciones el 15 de junio, con dos equipos ubicados en el Hacho y en García Aldave, compuestos por cinco personas cada uno. Sin embargo, en la actualidad, “el Gobierno ha decidido reducir el retén a un solo equipo de tres personas, ubicado solo en García Aldave. Además, se ha recortado el periodo de funcionamiento, limitándolo únicamente a los meses de julio y agosto, cuando anteriormente se extendía hasta el 15 de septiembre”.
Cabe recordar que, precisamente, el incendio más grave de los últimos años, que tenía lugar el pasado año, tenía lugar en el mes de septiembre, un mes en el que históricamente han ocurrido tragedias como la mencionada y que precisamente es uno de los periodos que, ahora, se pretenden dejar sin retén de bomberos en el monte
El Gobierno ha justificado esta medida con razones económicas, pero los bomberos consideran que “es un recorte injustificado que pone en peligro la seguridad de todos”. Argumentan que la campaña forestal está bien definida y que el propio Gobierno reconoce la necesidad de contar con este servicio. Aseguran que las cámaras térmicas, si bien pueden ser útiles, no reemplazan la presencia de un retén en el monte, ya que el tiempo de respuesta es mucho menor si los bomberos están allí mismo.
Los bomberos de Ceuta aseguran que “están cansados de reivindicarse como trabajadores y de luchar contra las precarias condiciones laborales y los continuos recortes”. Han decidido “plantarse” ante esta situación y denunciar la “falta de compromiso del Gobierno con la seguridad y la protección de los ciudadanos”. Consideran que “están jugando con la seguridad de los trabajadores y con la de toda la población”.
La labor de los bomberos en la prevención y extinción de incendios forestales es fundamental para garantizar la seguridad de los espacios naturales y de los ciudadanos. “La reducción del retén en el monte supone un grave retroceso en la capacidad de respuesta ante posibles emergencias, lo cual es especialmente preocupante en una zona como Ceuta, donde el riesgo de incendios forestales es alto” aseguran las mismas fuentes, tal y como hemos podido ser testigos los ciudadanos estos pasados, años, con el último incendio de gran magnitud en septiembre del pasado año.
Los bomberos de Ceuta exigen al Gobierno que “revierta esta decisión y garantice la presencia de un retén de bomberos durante todo el periodo de riesgo de incendios”. Además, instan a las autoridades a escuchar sus demandas de mejores condiciones laborales y a “priorizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos”. La protección del patrimonio natural y la seguridad de la población deben ser una prioridad indiscutible, y para ello es necesario contar con un cuerpo de bomberos adecuadamente equipado y con suficiente personal durante todo el año.
Precisamente, el Defensor del Pueblo ha emitido hoy un comunicado en el que pide a las administraciones reforzar las medidas de prevención de incendios forestales y mejorar la resistencia y recuperación de los montes frente al fuego. Esta solicitud, que se concreta en recordatorios de deberes legales, se formula tras analizar la información recibida de las administraciones en respuesta a una veintena de actuaciones de oficio que la institución inició tras los graves incendios ocurridos el pasado verano, y la necesidad de comprobar el grado de cumplimiento de las medidas urgentes aprobadas por el Gobierno en agosto de 2022.
