Unas 1.200 personas han porteado hoy entre Ceuta y Marruecos, sin apenas incidentes, en una jornada reservada solo a hombres. Sin embargo, la referida tranquilidad en los polígonos contrasta con importantes retenciones, que prácticamente han llegado hasta la Iglesia del Carmen a lo largo de toda la jornada.
El motivo principal, según fuentes de la Guardia Civil, es se han estado produciendo importantes atascos en el lado marroquí de la frontera, lo que ha llevado a las fuerzas del vecino país a cerrar el acceso a Ceuta. Eso tiene una especie de "efecto dominó" en Ceuta, puesto que para evitar una aglomeración de vehículos en la denominada "tierra de nadie", se restringe también el tráfico en dirección hacia Marruecos. El tráfico también se ha visto ralentizado por una serie de derribos programados en algunos locales cercanos a la carretera.
Por otro lado, salvo alguna infracción administrativa, no se requisa ningún tipo de mercancía a los turistas que vienen a comprar a Ceuta. Así lo cuentan las precisadas fuentes, que cuentan que este extremo se suele producir cuando en algunas ocasiones estos turistas intentan pasar a la fuerza.
