'Picogate' al margen, en España pasan más cosas. Por ejemplo: tenemos unas Cortes que constituir y la posibilidad de unas Elecciones Generales el 14 de enero sobrevolando sobre la mesa. De ahí que en las últimas horas se hayan intensificado las declaraciones, más allá del 'Caso Rubiales', en la política nacional. Por ejemplo: en la tarde del domingo, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, abría el curso político en el Castillo de Sotomayor, en Pontevedra. Un acto en el que admitía, entre líneas, la dificultad para formar Gobierno: "si la investidura consiste en ceder y plegarse a todos y cada uno de los que quieren irse de nuestro país y humillar más a las instituciones, está claro que la ganará Sánchez y la perderá España”.
Esta misma mañana, era el portavoz de campaña de los 'populares', Borja Sémper, quien comparecía para confirmar el inicio de la ronda de contactos con otras formaciones políticas y que el propio Feijóo va a llamar a Sánchez en las próximas horas "para un encuentro al máximo nivel" que permita desbloquear la situación. El PP sigue tratando de buscar un gran acuerdo, que permita garantizar la investidura de Feijóo sin que el concurso de los independentistas sea necesario.
Porque en el horizonte aparece Junts. El partido de Carles Puigdemont, prófugo de la Justicia, tiene la llave para desbloquear la situación. Y en el PP hay debate. Alejandro Fernández, presidente de los 'populares' en Cataluña considera que no hay que hablar con ellos, habida cuenta de la trayectoria de Puigdemont. Mientras, desde la Junta de Andalucía, su portavoz, Ramón Fernández-Pacheco, señala que lo importante "no es hablar con Puigdemont, sino de que se habla", por lo que pide y da por seguro que habrá "luz y taquígrafos".
Desde el PSOE, no mueven ficha. Si en Sumar: el partido de Yolanda Díaz apuesta por una Ley de Amnistía sobre el 1-O -propuesta clave para el mundo del independentismo- y su portavoz, Ernest Urtasun, pide a Feijóo que "admita ya su derrota". Y en el PNV, surgen dudas. Determinadas encuestas de opinión apuntan a un hundimiento de los nacionalistas vascos, con un PSOE que se mantendría y un PP al alza en el escenario de una repetición electoral. Y, según El Español, empiezan a surgir voces tendentes a la abstención. "Arzalluz no habría tenido complejos", dicen a El Español dirigentes del PNV...
