viernes. 19.04.2024

El preludio de la campaña electoral que, a buen seguro, será mucho más intensa que la precampaña, ha arrojado no poca impaciencia por parte de los dos grandes partidos, PP y PSOE, que han acabado con sendas denuncias y sanciones ante la Junta Electoral de Zona por adelantarse al procedimiento que habrían de seguir en el ámbito del calendario electoral: los "populares" situaron una foto de su líder, Juan Vivas como reclamo, mientras los socialistas, buzonearon antes de tiempo, algunas de sus propuestas de cara al 28-M.

La problemática del colapso en la frontera para el tránsito, con demoras insufribles, así como la precariedad sanitaria actual con reiteradas protestas y reivindicaciones de todo tipo, también han jalonado la actividad cotidiana de los partidos. El PSOE ha centrado su línea de actuación en "desgastar" al Gobierno por su actuación en barriadas, el MDyC también le acusa de "electoralismo" por la campaña de asfaltado en estos días y las tres formaciones de  carácter nacional, PP, PSOE y Vox, han desplazado a importantes políticos para desplegar su potencial electoral.

Con todo este despliegue nos llega la información de la respuesta de la Junta Electoral, acerca del escrito que el pasado 2 de este mes presentó en esta instancia el representante de Podemos, solicitando concurrir al debate electoral, en caso de producirse el mismo en razón a la neutralidad, respondiendo la instancia que regula el proceso electoral: "Sin que por esta Junta Electoral deba efectuarse pronunciamiento al respecto, sin perjuicio de dar traslado del mismo a los entes públicos, asi como al presidente de la Comisión de Radio y Televisión, para su conocimiento a los efectos oportunos". Es decir, se inhibe, se lava las manos la Junta Electoral, sobre la neutralidad y pluralidad informativa que requería la formación política de Ramón Rodríguez, dejando en manos de terceros la decisión final a este respecto.

No deja de ser una salida airosa para no "mojarse" en un asunto de tanta trascendencia, toda vez que se dilucidan, ni más ni menos, que las posibilidades de equilibrio en el juego político cara a unas elecciones para que éstas sean lo más participativas posibles.
El requerimiento de Podemos no es baladí por cuanto los debates se convierten en un instrumento decisivo a nivel electoral en donde pronunciarse abiertamente. La Junta Electoral ha optado por una decisión salomónica y traslada a otros escenarios y protagonistas la decisión final sobre este controvertido asunto.

La Junta Electoral se inhibe sobre los debates abiertos que pidió Podemos