El cierre de las fronteras marroquíes al inicio de la crisis sanitaria del coronavirus dejaba a cerca de 7.500 ciudadanos del país vecino fuera de su territorio, una situación que, ahora, a las puertas del Ramadán, podría revertirse. Al menos así lo baraja la prensa de Marruecos, tal y como recogen este miércoles los medios de de la ciudad hermana de Melilla, que citando al diario Kawalis Rif, señalan que Marruecos ha decidido abrir sus fronteras para que quienes se han quedado en el extranjero puedan regresar.
Una cuestión que está generando el debate en el seno del Gobierno marroquí, entre los partidarios de que se produzca esta repatriación, entre los que se encontraría en responsable de Asuntos Exteriores, y los que temen los efectos de esta apertura respecto a la enfermedad, entre los que se encontraría el ministro de Sanidad.
Este reapertura de las fronteras tendría un efecto directo en las ciudades de Ceuta y Melilla, que se han visto obligadas a alojar a cientos de transfronterizos, en torno a 400 en nuestra ciudad y más de 500 en la ciudad hermana, ante su imposibilidad de regresar a su país.
El diario marroquí, citando fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores de Marruecos, señala que las fronteras se abrirían la próxima semana, así como que quienes decidan regresar a su país tendrán que pasar la cuarentena en hoteles habilitados a tal efecto, con el fin de impedir la expansión del virus.
