viernes. 26.04.2024

El grupo de personas de la tercera edad representa un alto porcentaje del total de la población que, además,   se había multiplicado ya por nueve entre 1900 y 2017 y actualmente suman cerca del 45% de la sociedad; y muchas de ellas viven solas. Esta situación hace que se enfrenten a problemas cotidianos derivados de la falta de mantenimiento de las viviendas o de fallos o averías que pueden aumentar el riesgo de accidentes domésticos.

Coincidiendo con la conmemoración hoy del Día Internacional de las Personas de Edad, ofrecemos algunos consejos para proteger a nuestros mayores haciendo uso de la tecnología y otras herramientas. “A medida que la inversión de la pirámide de población avanza, la tecnología lo hace de forma paralela, poniendo al servicio de los usuarios gran cantidad de ayudas y recursos”, apuntan los expertos.

En este sentido, los expertos indican que existen una variedad de sistemas que las personas mayores pueden usar para estar más protegidas y sentirse más seguras e independientes. Este es el caso de los sistemas de videovigilancia y dispositivos de teleasistencia que están pensados para ofrecer mayor seguridad a las personas mayores que viven solas y darles una atención continuada. Así, existen mecanismos con inteligencia artificial que detectan caídas y pueden enviar alertas para tomar medidas rápidas. “Este tipo de sistemas pueden llegar incluso a salvar la vida de una persona que se encuentre en situación de riesgo”, subrayan los expertos.

Principales riesgos en casa

Aunque existen múltiples y diversos riesgos en el hogar, el baño es una de las estancias con más riesgo, pues es donde más número de caídas se producen y, en concreto, la bañera es uno de los peores enemigos de las personas mayores. Aconsejan sustituirla por un plato de ducha que quede instalado, en la medida de lo posible, a nivel de suelo. En el baño, también aconsejan evitar el uso de calefactores o cualquier otro aparato a menos de un metro y medio de distancia del agua y desconectarlo mientras estamos dentro del agua.

La cocina y el dormitorio son también estancias con riesgo de caídas y otros incidentes. Así, en la cocina se pueden producir quemaduras o incendios, por lo que es fundamental extremar precauciones para los más mayores y dejar un acceso libre y sencillo a los utensilios de cocina más utilizados, así como dejar trapos u otros textiles alejados del fuego. En el caso del dormitorio, aunque puede parecer menos peligroso, también pueden producirse caídas o golpes por dejar las cosas de forma descuidada. Así, los expertos recomiendan colocar “a mano” las cajas de medicamentos y otros utensilios que se utilicen de forma recurrente, evitando así que los mayores tengan que utilizar escaleras o sillas para acceder a ellos.

Por último, los expertos recuerdan la importancia de prestar atención al buen estado de las zonas comunes y es indispensable contar con una buena iluminación para evitar tropiezos, hacer revisiones periódicas de la instalación eléctrica para evitar cortocircuitos o incendios, y a otros elementos como la caldera, que debemos revisar de forma anual para garantizar que todo funciona correctamente.

Consejos para proteger a tus mayores en el hogar