Tras el segundo apedreamiento de este jueves, Hadú-Almadraba ha decidido que el autobús que realizar la línea que lleva a la Frontera no cumpla el servicio hasta la última parada debido al peligro de lesiones para conductores y pasajeros, y de daños para el propio vehículo.
El pasado miércoles un vehículo de la empresa vivió un episodio vandálico en la zona de Loma Colmenar cuando le lanzaron piedras. Este jueves el acto se ha repetido por partida doble siendo apedreado un autobús en cerca de la frontera del Tarajal y aproximadamente dos horas después sufriendo un segundo apedreamiento junto a la plaza de la Almadraba.
Ante el riesgo que supone para pasajeros y conductores, la empres ha tomado la determinación de detener el servicio antes de la última parada, por lo que la línea no llega a la Frontera.
Un situación de la que tanto trabajadores como la dirección de la empresa han manifestados estar cansados ya, al tener que sufrir con mucha frecuencias estas situaciones que pone en riesgo la salud, y supone daños a los vehículos.
