domingo. 28.04.2024

El presidente de la Junta de Personal Docente, Francisco Lobato, ha hecho balance este lunes del curso escolar que acaba de llegar a su fin en lo que implica a la situación tanto de docentes como del alumnado. Un curso en el que lo primero que hay que destacar, ha explicado, es que “hemos vuelto a la normalidad tras la pandemia”. Así, Lobato ha recordado que el año pasado quedaban aún algunos docentes dedicados a cubrir cuestiones relativas a la misma y ha destacado que este año no se ha producido ningún tipo de rebrote, regresando a la normalidad “que ya se echaba en falta”, sin reducción horaria, ni mascarillas, ni nada de lo que marcó los dos cursos anteriores.

Una de las principales circunstancias que han marcado este curso ha sido la aplicación simultánea de dos leyes educativas la LOMCE, que se ha seguido aplicando en los cursos pares, y la LOMLOE, de aplicación ya en los impares. Este hecho, ha explicado, ha producido divergencias antes las diferentes programaciones, especialmente en los maestros especialistas y los profesores de institutos que dan clase en diferentes niveles a la vez. Para el presidente de la Junta de Personal Docente, “lo lamentable es que, desgraciadamente, si hay un cambio de Gobierno, seguramente van a volver a cambiar la ley”. Unos cambios de leyes, ha recordado, que están “hartos de denunciar” por lo que ha reclamado “un acuerdo de todos los partidos para que la ley tenga perdurabilidad en el tiempo” y no se den casos, como ahora, en los que los alumnos pasan hasta por tres leyes educativas diferentes durante su periodo escolar.

Una de las principales quejas de este curso, ya lo fue en el anterior, ha sido la excesiva burocracia a la que se han enfrentado los docentes. “Se exige mucho papeleo para cualquier cosa y esto, que debería suponer una garantía, acaba generando que se dedica más tiempo a los papeles que a los alumnos”, ha lamentado Lobato.

También entre las quejas se encuentra la “falta de dedicación a la educación especial”. El presidente de la Junta de Personal Docente ha recordado que en años anteriores “se ha cubierto con el plan de empleo” pero que este año no ha sido así, lo que “ha producido verdaderos problemas para aquellos alumnos que tienen alguna dificultad y requieren de una atención específica”.

Finalmente, entre las cuestiones positivas, Lobato ha destacado la integración de los profesores de FP en el cuerpo de Secundaria con la excepción de diez especialidades en las que sus docentes son técnicos superiores y no universitarios. En su situación, ha explicado, se continuará trabajando con el fin de que puedan ser incluidos en el mismo cuerpo. En este sentido, ha explicado Lobato, recuperan una vieja aspiración, la creación de un cuerpo único en el que se incluya a todos los docentes, también a los maestros.

También positivo ha sido el desarrollo del proceso de estabilización en sus dos vertientes, la del concurso y la del concurso oposición que sigue desarrollándose en estos días.

Finalmente, el representante de los profesores ha destacado que las reivindicaciones y la recogida de firma para la reunión del grupo de trabajo han dado frutos, lográndose la reducción horaria tanto tiempo reclamada tanto en Secundaria como en Primaria y el aumento del cupo de docentes para alumnos con necesidades educativas especiales. Igualmente consideran positiva la modificación de la orden de interinos, en la que se han corregido aspectos que los sindicatos venían reclamando desde hace años.

La falta de atención a la Educación Especial y el retorno a la normalidad, claves del...