Dos vehículos de la Policía Nacional recorrían en la mañana de este miércoles la avenida Conde de Barcelona -el 'Cañonero Dato' de siempre, para entendernos- a una gran velocidad y con las sirenas puestas. Su destino eran los alrededores del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes, CETI, donde se estaba produciendo una pelea.
En el caso de este miércoles, según fuentes policiales, no ha sido una pelea excesivamente dura. La presencia policial, por si sola, sirve como elemento disuasiorio y parece que no ha habido ni lesiones ni detenciones. Pero las fuentes consultadas aclaran que "se está convirtiendo en un diario, ,en algo casi rutinario".
Más allá de los problemas de convivencia que puedan surgir entre personas, "los enfrentamientos suelen ser por colectivos. En esta ocasión, han sido magrebíes contra subsaharianos", aclaran. Pero sobre todo por un elemento que está entrando en juego en los últimos meses: las solicitudes de asilo político.
Y es que "muchas de estas personas llegan a Ceuta, piden asilo político y eso luego influye" a la hora de salir a la Península. "Es un clavo ardiendo, legal, al que se agarran: salen de Ceuta, se quedan en alguna ciudad de la península en tanto en cuanto tramitan toda la documentación y van aportando documentos que, a su condición de asilados políticos, les permita sumar la de arraigados en España". Con esto "muchos consiguen la nacionalidad. Pero en Ceuta están más localizados, por lo que todos tienen cierta prisa" en dejar la Ciudad Autónoma.
El asilo político es el clavo al que se están agarrando, también y en los últimos meses, ciudadanos marroquíes. "Muchos ya no se hacen pasar por argelinos para evitar la devolución. Directamente, señalan que son marroquíes y residen como tal" en un CETI en el que, recordemos, en los últimos años hemos tenido rusos, ucranianos, chinos o colombianos entre otras nacionalidades poco 'habituales'. La posibiilidad de un conflicto armado entre Marruecos y Argelia es uno de los causantes, aclara otra fuente, de que soliciten el estatus de refugiado político en Ceuta "alegando desde su condición sexual hasta delitos contra la libertad religiosa" en algunos casos.
